Se dio un momento histórico en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. El italiano Gianmarco Tamberi y el catarí Mutaz Essa Barshim quedaron igualados en la final de salto alto. Pudieron desempatar, pero ambos resolvieron compartir la medalla dorada.
Después de fallar en el intento de 2,39 metros y acabar igualados en la marca 2,37 los dos atletas decidieron rechazar la posibilidad de llevar a cabo un desempate y ambos se subieron al primer lugar del podio en salto alto.
Una vez que las autoridades avalaron ese pacto, el italiano le dio un gran abrazo a Barshim y se cayó al suelo de emoción. Esto se debió a que Tamberi, de 29 años, llegó con lo justo a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 tras una lesión complicada en el tobillo. En su alocado festejo se vio el yeso que usó durante su recuperación.
El catarí, de 30 años, logró en Tokio 2020 su primera medalla de oro tras haberse proclamado campeón del mundo en dos oportunidades y ganar las medallas de plata en los Juegos Olímpicos de Londres 2012 y Río 2016.