María Pía Fernández corrió los 1.500 metros este domingo de noche, ya en la mañana japonesa del lunes, en su debut olímpico. Lesionada desde el jueves y con la consigna de no abandonar, compitió como pudo y llegó a la línea de meta con enorme esfuerzo. Entre satisfacción por cumplir y dolor por lo sucedido, habló tras la carrera con FútbolUy.
“Tanto en la clasificación como en la preparación la luché muchísimo para llegar acá y para llegar en mi mejor estado de forma. Dejé mi familia mucho tiempo y a las personas que quiero para prepararme y llegar al 100% y lo hice. Llegaba en mi 120% pero cuando uno más arriba está, más fácil es caer”, reflexionó.
“El jueves, haciendo el último entrenamiento, sentí un fuerte pinchazo. Cuando me fui de la pista ya me di cuenta que me había roto y luego, ecografía y resonancia mediante, me dijeron que tenía una lesión. Se me vino el mundo abajo. Desde el jueves hasta acá que no pude hacer absolutamente nada porque me dolía, no podía trotar”, agregó.
“Ni siquiera pude trotar en la entrada en calor. Pedí para estar en esa línea de largada porque considero que me lo merecía. Merecía pararme en esa línea porque me costó mucho llegar acá. Me hice responsable y después de que sonó el disparo me olvidé de todo. Me olvidé del dolor y la lesión. Corrí, dejé todo como siempre aunque hoy todo fuera un 10%”, indicó.
Muy emocionada, agradeció a quienes la ayudaron y contó que se planteó llegar a Tokio 2020 tras ver por televisión los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro. Ahora, tras esa distensión de nueve milímetros en el gemelo derecho, va por más: “Hoy, como hace cinco años me prometí eso, prometo que voy a llegar a París, voy a redoblar esfuerzos y voy a tener mi revancha”.
María Pía Fernández y su actuación en Tokio 2020 from Montevideo Portal on Vimeo.