Novak Djokovic volvió a jugar este martes, 16 días después de su derrota en sets corridos a manos de Rafael Nadal en la final del Roland Garros. Por la primera ronda del ATP 500 de Viena, sobre superficie dura, el serbio derrotó 7-6 y 6-3 a su compatriota Filip Krajinovic, 30.º de la clasificación mundial.
El número uno del mundo no la tuvo fácil frente a un jugador que, llamativamente, lo había vencido dos de las tres veces que jugaron. En el primer set estaba 3-5 y con saque en contra abajo, pero logró un quiebre y terminó forzando un tie break en el que levantó dos set points.
Dos breaks logrados en el segundo set le permitieron a Djokovic abrochar un 6-3 bastante más cómodo que el 7-6 del primero. Tras una hora y 58 minutos de dura batalla marcó su vuelta al torneo austríaco, un certamen que había disputado por última vez en 2007, cuando se coronó campeón.
En cuartos de final el jugador nacido en Belgrado hace 33 años tendrá como oponente a Borna Coric (24.), croata de 23 años que superó al estadounidense Taylor Fritz (29.º) con un doble 6-4.