El 17 de julio se reanudará el campeonato ecuatoriano tras el parón por la pandemia del COVID-19. Los equipos se preparan para la vuelta de los entrenamientos y comenzar a prepararse de cara al torneo.
El entrenador del Deportivo Cuenca, Tabaré Silva, se refirió en una entrevista con el portal el Comercio sobre cuánto podrían haber perdido sus futbolistas después de tanto tiempo sin entrenar.
"Cuando regresemos a la cancha y empecemos a entrenarnos vamos a saber cuál es el porcentaje y la magnitud de lo que se ha perdido en la parte física y táctica. Por suerte hay seis semanas para el reinicio del torneo nacional y allí tendremos un panorama más claro de la realidad. Es evidente que se ha perdido mucho con relación a cómo se encontraban los futbolistas antes del encierro", estableció.
Con seis semanas de preparación, Silva dejó en claro que es un tiempo acorde para reacondicionar a sus dirigidos, pero "estoy consciente que los primeros partidos van a costar mucho, se necesita tiempo para retomar el ritmo de competencia".
El exentrenador de Defensor Sporting comentó cómo serán los primeros entrenamientos que arrancarán el miércoles 10 de junio: "La primera semana será de evaluaciones y de a poco se intensificarán las cargas de entrenamiento. Con seis semanas disponibles tampoco podemos hacer una pretemporada, como al inicio del año, pero se va a priorizar la parte física y táctica. También se tomará muy en cuenta la prevención de lesiones porque vamos a convivir con eso. En las ligas que han empezado hay jugadores lesionados y es normal".
"Desde el miércoles lo haremos en dos grupos de 12 jugadores. Con semáforo amarillo, la Liga Pro permite trabajar hasta con 15 jugadores. Además, sugiere una lista de 24 jugadores a todos los clubes y con ese número vamos a trabajar. Hay la opción de presentar otra nómina de 15 futbolistas, que se puede ir cambiando por algún motivo", manifestó.
Además de las lesiones, Silva se refirió al otro gran miedo que tienen sus jugadores y es poder contagiarse el virus del COVID-19: "Hay una realidad: vamos a convivir con el virus y por eso hay que ser muy responsables. No porque se cambió el color del semáforo y volvemos a los entrenamientos está todo solucionado. Sin duda, habrá ese temor en los primeros días, pero se minimizará aquello con las debidas previsiones".
Por último, el entrenador argumentó que clubes podrán tener una cierta ventaja con el resto por esta situación: "Aquellos clubes que tienen una plantilla más grande pueden marcar diferencias. Se jugarán muchos partidos, habrá una carga fuerte luego de esta paralización tan larga. Creo que eso puede ser un elemento determinante para generar un desnivel".