Peñarol perdió con Millonarios 3-1 en Bogotá por la cuarta fecha del grupo F de la Copa Sudamericana, que lo tiene último, sin puntos y sin chances de avanzar de ronda.

El encuentro arrancó de la peor manera para el equipo de Alfredo Arias. Beckham David Castro ejecutó un córner desde la derecha del ataque colombiano y Jorge Arias cabeceó solo en el área chica para abrir el tanteador.

Siguió haciendo méritos el local para liquidar el pleito rápidamente y lo logró a los 23’, cuando tras una jugada por derecha Luis Andrés Bustamante remató al medio y Hernán Menosse batió su propio arco en un fallido intento por despejar.

Por si fuera poco, a los 29’ apareció el propio Bustamante para el 3-0, que a esa altura ya era justificado. Había un solo equipo en la cancha, y hasta pudo haberse llevado un resultado más amplio al entretiempo, tras el cual la lluvia ganó protagonismo.

Bruno Betancor, el único exponente digno de destaque en filas carboneras, forzó un penal que Matías Arezo transformó en gol a los 49’, ya con el conjunto local bajando el ritmo y levantando el pie del acelerador.

A los 58’, el equipo arbitral encabezado por el venezolano Alexis Herrera mandó a los futbolistas al vestuario porque la lluvia estaba afectando demasiado. Los charcos en el terreno de juego eran cada vez más grandes y la pelota no picaba ni rodaba con normalidad.

Empezó una larga espera en la que los jueces salieron del vestuario a chequear el estado de la cancha. Funcionarios del Campín de Bogotá, a puro lampazo, hicieron esfuerzos para sacar el agua del campo, pero la lluvia no cesaba.

Después de una hora y media, se reanudó el partido y Peñarol buscó con variantes y empuje ir sobre el arco de Millonarios, pero sin poder descontar. El local reguló energías y concretó una victoria que lo dejó primero con 10 puntos, uno más que Defensa y Justicia.