El partido comenzó complicado para Liverpool ante un rival que se mostró peligroso y veloz en ofensiva, complicando cada vez que se lanzaba sobre el arco rival y tratando de jugar colectivamente para moverse en bloque.
Los de Pezzolano dependían mucho de los momentos de inspiración de Franco y Guastavino, que cuando podían acceder a la pelota eran incisivos y complicados de controlar.
Cada uno de ellos tuvo una aproximación, con un cabezazo y luego un remate a distancia respectivamente pero sin la precisión necesaria como para complicar a Alain Baroja.
Los venezolanos contrarrestaban con las incursiones de Canelón y en los pies de Celis tuvieron una clara que de no ser por Jorge Bava podía haber significado la apertura.
Poco pasó de allí al cierre de esos 45', con los de Belvedere intentando acercarse pero carente de ideas y claridad, mientras que los visitantes, bien parados, no pasaban mayores sobresaltos.
En la hora
En el complemento el trámite prosiguió sin mayores cambios, ya que a esa altura Franco no pesaba en el juego, Figueredo estaba controlado y los venezolanos cerraban espacios para no sufrir sorpresas.
Ante ello los negriazules apostaron a luchar mucho más el partido que jugarlo y tuvieron su gran posibilidad a los 59' cuando en la primera clara de Federico Martínez sacó tremendo remate de media distancia que dio en el travesaño, bajó y no llegó a cruzar la línea.
Pezzolano apostó al ingreso de Juan Ignacio Ramírez y esto le dio otro aire a la ofensiva, ya que combinó mucho mejor con el propio Martínez, el mejor negriazul y a esta dupla se sumó otro del banco Bryan Olivera.
Este último con un buen remate de media distancia volvió a avisar a falta de diez para el cierre, momento en que los visitantes ya estaban muy retrasados en la cancha, tratando de asegurar el cero en su arco y porque no esperar un zarpazo final.
Pero la llave del gol estaba en el cierre, cuando una pelota por izquierda cayó en los pies de Romero que colocó gran centro al área y Maximiliano Bajter apareció en el centro del área para cabecear al fondo de las redes y concretar el único gol del partido.
Gran triunfo de Liverpool sobre el cierre de las acciones por 1-0, que lo deja con una buena renta para tratar de cerrar el duelo en Venezuela y dar otro paso en la Sudamericana.