Peñarol perdió 4-1 en su visita a Defensa y Justicia por la tercera fecha del grupo F de la Copa Sudamericana, sigue último sin puntos y está virtualmente eliminado, ya que necesita resultados ajenos y lo más difícil; ganar los nueve puntos ante los mismos rivales contra los que todavía no pudo sumar uno.
El partido en Florencio Varela arrancó con un buen sabor de boca para el equipo de Alfredo Arias, que a los 4’ tuvo una llegada muy clara. Matías Aguirregaray picó al vacío y recibió un buen pase profundo de Sebastián Rodríguez, pero el arquero Ezequiel Unsain tapó su derechazo cruzado.
Un minuto después probó Matías Arezo con un disparo desde muy lejos que pasó cerca, en la única intervención del goleador carbonero en todo el primer tiempo. Fue además la última llegada mirasol antes del descanso.
A los 17’ salió muy sentido en su rodilla derecha Brian Mansilla e ingresó Kevin Méndez, y siete minutos después el local tuvo que quemar una variante por la lesión de Gabriel Alanís, por quien entró Santiago Solari.
El trámite era chato, parejo y sin jugadas de peligro cerca de los arcos, hasta que a los 39’ el uruguayo Agustín Sant’Anna abrió el tanteador para el dueño de casa con un imponente zurdazo desde muy lejos que se metió a escasos centímetros del ángulo.
Por si fuera poco, a los 46’ de la primera parte cayó el 2-0. Solari llegó muy suelto al fondo por derecha y centró por bajo, Nicolás Fernández definió en el área chica y Thiago Cardozo tapó a quemarropa, pero en el rebote apareció otra vez Sant’Anna para capitalizar el rebote ante la pasiva mirada del fondo aurinegro.
Para el complemento movió fichas Arias con el ingreso de Rodrigo Saravia por el juvenil Nahuel Herrera, por lo que pasó a defender con cuatro defensores, solidificó el mediocampo y se fue con todo arriba, pero sin perder el balance.
A los 58’ cayó el descuento aurinegro. Méndez encaró por izquierda y encontró en el área a Arezo, quien pivoteó en el área, luchó desde el piso y jugó atrás para Sebastián Rodríguez, quien desde la medialuna conectó un certero zurdazo rasante y esquinado.
Obligado por el resultado siguió yendo Peñarol y arrinconó a su rival. Primero avisó con una llegada a fondo de Arezo que definió Betancor en el área chica y tapó Unsain a los 61’, y un minuto después se lució el lateral Alexis Soto cerrando ante Betancor en el área chica después de que desbordara Méndez por izquierda.
Con esas chances malogradas se terminaron las posibilidades de Peñarol en el partido. Defensa y Justicia recuperó el control de la pelota y a los 70’ metió el tercero con una buena definición de Nicolás Fernández.
Por si fuera poco, a los 80’ aumentó de contragolpe Gastón Togni con un zurdazo cruzado que no encontró una buena respuesta del arquero Cardozo.
Ya no recibió más goles el equipo más goleado de la Sudamericana en los minutos finales, aunque Defensa y Justicia se perdió el quinto de contragolpe a los 90’ por el egoísmo de Solari.
Sin puntos y con un saldo de dos tantos a favor y 10 en contra, Peñarol perdió el partido que necesitaba ganar para prenderse en la pelea y ya debe pensar, como es habitual en las últimas dos décadas, en el Campeonato Uruguayo.