Danubio volvió a quedar afuera de la Copa Sudamericana definiendo como local, tal como pasó el año pasado ante Tacuarí. Esta vez el rival fue Universidad Católica, que con más renombre lo venció 1-0 en Santiago y 2-1 en Montevideo, en ambas oportunidades con justicia.

El equipo de Jorge Castelli salió agresivo en la búsqueda de la remontada pero poco claro, más allá de que generó la única aproximación a los 15’. El arquero Toselli tuvo que salir de su arco a cortar un pique de Sebastián Fernández y dejó el balón a pedir de Ignacio González, quien desde lejos le erró al arco vacío.

Apenas tres minutos después cayó un baldazo de agua fría en el Franzini. Un centro de Juan Carlos Espinoza desde la izquierda del avance chileno cayó con mucho efecto en el corazón del área franjeada y Matías De los Santos, en su intento por despejar de cabeza, venció su propio arco.

Danubio acusó el impacto del gol hasta el descanso y la iniciativa fue de Universidad Católica, que tuvo más la pelota y casi aumenta de tiro libre por obra de Marco Medel a los 36’. El esférico pasó a escasos centímetros del vertical izquierdo del arco locatario.

Juan Manuel Olivera fue poco abastecido, Nacho González se recostó demasiado sobre la derecha y el único que inquietó fue Fernández, que generó la otra llegada a los 37’ cuando se filtró en el área y adelantó apenas el balón, perdiéndolo ante la salida de Toselli.

Para el segundo tiempo Castelli mandó tres cambios, y pese a no variar el sistema táctico su equipo funcionó mejor porque tuvo un armador. Grossmuller entró por González (Fernández pasó) a la derecha, Saracchi sustituyó a Leandro Sosa y Faber ingresó por el amonestado Viana.

A los 5’ llegó el 1-1 y parecía reaccionar el dueño de casa, que se plantaba con otra actitud en cancha. Fernández filtró el balón para Olivera en el área y el ariete danubiano definió con exquisitez, pinchándolo sobre la salida del guardameta.

Los chilenos apelaron a infracciones para cortar el juego, se cargaron de amonestaciones y perdieron el dominio de la bola por unos 20 minutos. Grossmuller acarició el 1-1 a los 15’, cuando un mano a mano con Toselli terminó con un disparo en el vertical, pero luego sucedió poco.

Universidad Católica empezó a encontrar más espacios para contragolpear y salió del asedio de Danubio volviendo a atacar, por lo que amagó con sentenciar el pleito varias veces y cumplió a los 82’, cuando Mark González apareció en el área chica para tocar corto ante un buscapié de Medel, figura de la noche a pura habilidad.

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