Dio comienzo la 8° jornada de la Serie A italiana con el triunfo 3-1 de Napoli como local en el estadio Diego Armando Maradona sobre el Torino, lo que lo coloca en la cima de la tabla en solitario. Mathías Olivera fue suplente e ingresó a los 81 minutos.
El festival napolitano dio comienzo en el minuto cinco, casi sin tiempo para tomar asiento. 'Kvara' encontró en profundidad el desmarque de Mario Rui por banda para que sacara un centro al corazón del área que remató André Zambo Anguissa, que cruzó perfectamente y ajustó tanto que antes de entrar tocó en la madera.
Con el marcador a favor, mostró liderazgo y madurez. Mantuvo la posesión, movió a la defensa del conjunto turinés y encontró el espacio para hacer el segundo.
De nuevo a cargo de Anguissa, con una simple pared con Raspadori, encontró el espacio e inició en campo propio una carrera en la que no tuvo rival. Levantó la cabeza, vio complicado el pase atrás y decidió terminar su obra. Doblete para Anguissa en doce minutos.
Quitó el pie del acelerador el conjunto local y dio un respiro al Torino. Pero los errores no se perdonan, y menos cuando entra en acción la nueva estrella de la ciudad sureña, el georgiano Kvaratskhelia.
Una pérdida del Torino en el centro del campo fue lo único que necesitó 'Kvara' para tirar el desmarque en profundidad por banda. De nuevo Raspadori hizo de asistente y puso el balón en largo. El georgiano definió con zurda por abajo, potente y esquinado, tanto que el balón golpeó en el palo antes de poner el tercero sellar la victoria en el minuto 37.
Sin embargo, justo antes de encarar los vestuarios, Antonio Sanabria consiguió lo que parecía muy lejano y recortó distancias para los suyos. El Napoli se relajó en defensa y pecó de poca intensidad para despejar un balón muerto que cayó en pies del paraguayo, que no perdonó.
Pudo ser mayor el castigo cuando el paraguayo, con un cabezazo, a punto estuvo de poner el 3-2. Saltaron las alarmas en el Diego Armando Maradona mientras los jugadores encaraban el túnel de vestuarios.
Después del gol encajado, los de Spalletti saltaron muy alerta y evitaron cualquier atisbo de remontada dominando el balón. El técnico, viendo el partido dominado, movió rápido el banco.
Se mantuvo el resultado del primer acto. Nuevo golpe de autoridad del equipo napolitano en la Serie A, que deja la presión para el resto de perseguidores en esta octava jornada y que disfruta en la cima de la tabla con 20 puntos, tres más que Atalanta.