La racha de 22 años sin victorias sobre Brasil se cerró este martes a lo grande, con un triunfo que dejó a Uruguay en el segundo puesto de las Eliminatorias rumbo a la Copa del Mundo 2026 y que le permite soñar en grande de cara a lo que viene.

Para disfrutar lo que sigue en esta nota, es indispensable conectar los auriculares o prender los parlantes. El objetivo es volver a emocionarse con un grito de gol que hizo estallar más de 50.000 gargantas en el Centenario, y tres millones más desparramadas por el mundo.

A los 42’ picó Maximiliano Araújo por izquierda y, en lugar de intentar un remate al arco en buena posición, buscó el centro atrás para la aparición de Darwin Núñez, quien conectó un perfecto cabezazo en palomita para salir a gritar el tanto de cara a la platea Olímpica.

A los 76’ liquidó el pleito Nicolás de la Cruz, otra vez con Darwin como protagonista. El del Liverpool peleó una pelota que parecía perdida, como Luis Cubilla contra la URSS en México 1970, y el de River Plate apareció a lo goleador para liquidar el pleito.

Después hubo tiempo para la celebración en el vestuario, donde se mezclaron la emoción y la efusividad con el apuro: varios jugadores debían salir rapidísimo para tomar un avión en cuestión de minutos y volver a Europa, donde también hay varios disfrutando este 2-0.