Se enfrentaban Bath City y Weymouth por National League South, un campeonato que te da la clasificación a la quinta división (la última) del fútbol de Inglaterra y sobre el final del partido sucedió algo simplemente espectacular.
El arbitro del partido pitó penal para Bath City que ganaba 2 a 1 y buscaba liquidar el asunto. Pero Ryan Sandford, el galero del equipo visitante tenía otros planes.
Standford no solo atajó el penal, sino que también evitó el gol en tres ocasiones más en forma consecutiva. De igual manera, su equipo terminó cayendo, pero él se llevó todos los aplausos.
Fue tal la admiración, que hasta el conjunto rival subió la secuencia en su cuenta oficial de Twitter.