Este domingo a las 17:00 horas de Uruguay, Barcelona y Real Madrid protagonizarán un nuevo clásico en el Spotify Camp Nou, este vez por la fecha 26 de LaLiga de España. Por ese motivo, Ronald Araujo dialogó con ESPN y palpitó la previa del encuentro.
Se volverá a ver las caras con Federico Valverde, sobre quien dijo: “Enfrentarlo en la liga es duro, todos sabemos la calidad que tiene. Y después tenerlo en la selección es tremendo, porque es un jugador excepcional y nos da un salto de calidad muy alto”.
Con respecto al presente del Culé, comentó que “el equipo está bien, yo estoy bien y con mucha expectativa de poder jugar este partido tan importante”. “Tenemos que tomarlo como una final porque es un partido muy importante, podemos sacar una diferencia importante sabiendo que también queda poco para terminar la liga”, siguió.
Luego, analizó al brasileño Vinicius, a quien marcará en el sector derecho: “Para mí hoy es el número uno en el uno contra uno, es un jugador muy bueno, muy desequilibrante. Es difícil obviamente, pero trabajo para poder dar lo mejor y contento de que estén saliendo las cosas bien”.
La mejoría del Barcelona
“Ahora se está viendo el fruto de lo que veníamos trabajando. Xavi llegó a mitad de la temporada anterior y cuando estás jugando mucho no podés hacer muchas cosas. Creo que en la pretemporada pudimos trabajar mucho a nivel defensivo”, destacó el riverense.
Sobre Jules Koundé y Andreas Christensen, compañeros en la defensa, dijo: “Ellos dos son muy buenos jugadores que llegaron para ayudarnos, y nos aportan muchísimo. Se está viendo la solidez defensiva que es importante porque al final nos hace ganar partidos y era algo que teníamos que corregir de la temporada pasada”.
“Me gusta hablar porque es una manera, sobre todo para mí, de mantenerme concentrado y también sé que ayuda muchísimo al equipo. Creo que hay que tomar la voz del liderazgo y poder animar al equipo, es importante”, indicó.
Y contó sobre su etapa en el club, al cual llegó en 2018: “Pasó todo muy rápido. Gracias a Dios fue un cambio radical, prácticamente saltamos la escalera, desde abajo y ya directamente a Barcelona. Estoy contento de que estén saliendo las cosas bien. Obviamente que cuando llegás a un equipo como el Barça al principio cuesta, más con una filosofía única que tiene el club, pero con trabajo hoy se están viendo los frutos”.
Su experiencia en Catar
“El Mundial fue muy duro para mí, no lo pasé muy bien, sobre todo desde el día de la lesión que había que intentar recuperarme rápido para llegar; los tiempos eran muy cortos, le metí, hice de todo para poder estar”, apuntó, y agregó: “Se me dio la oportunidad de ir porque eran 26 jugadores, creo que si fueran 23 no hubiera ido”.
“Estuve a punto” de estar a la orden, afirmó. “Si pasábamos fase de grupos hubiera podido estar para ayudar. Quedarse afuera y no poder jugar con mi selección fue una decepción porque uno sueña desde chiquito jugar un Mundial, pero había que pasar página rápido”, finalizó.