Agustín Rogel está, a sus 24 años, en “el mejor momento” de su carrera en Estudiantes de La Plata, según contó al programa ‘Vamos que vamos’ de Radio Uruguay, luego de haberse ido muy joven de Nacional al Krylya Sovetov de Rusia y luego recalar en filas del Toulouse de Francia, donde no pudo mostrar todo su potencial.
“Era joven cuando fui a Rusia y me hizo madurar muchísimo en el fútbol y como persona por el cambio drástico que era vivir en ese país. Tuve continuidad y pasé casi un año ahí hasta que salió la venta a Francia. Ahí en el primer partido me quebré la clavícula en cuatro partes y estuve un tiempo parado. Cuando volví no estaba al 100% físicamente”, recordó.
“Después vino el receso por el covid-19 y el club en el medio de la pandemia se vendió a un grupo inversor estadounidense. Hubo muchos cambios y cuando quise acordar ya no había nadie de cuando llegué al club. No me sentía cómodo y quería jugar. Salió la oferta de Estudiantes, vine un año a préstamo y es el lugar donde me sentí más cómodo y mostré mi mejor versión”, dijo.
“Uno cuando tiene una continuidad importante y se afianza en un lugar, demuestra lo mejor de uno. La forma de jugar de Estudiantes y su filosofía van mucho conmigo y se me están dando buenos rendimientos. La gente hace sentir su apoyo. Yo me siento querido y dentro del grupo me siento importante. Eso me da confianza”, valoró.
Rogel llegó al equipo pincharrata en febrero de 2021 cedido con una opción de compra “que no se pudo hacer por las formas de pago y cosas que no pudieron arreglar entre los clubes”, pero decidió “dejar a un lado lo económico” y rescindir con el Toulouse para “seguir jugando y tener la oportunidad de disputar una Copa Libertadores, que era el anhelo con Estudiantes desde el año pasado”.
“Acá me siento cómodo y feliz. Me siento parte y por el momento no me arrepiento de la decisión que tomé. Estoy disfrutando. Estudiantes son palabras mayores. Es un equipo con mucha historia que tiene demasiada historia, con cuatro Copas Libertadores y una mística copera que nos da un empuje. Tiene una forma distinta de vivir el fútbol. Apenas llegás, te lo hacen saber”, ponderó.
Consultado por el partido del miércoles ante Nacional, el club que lo vio nacer, reconoció que volver al Gran Parque Central “será un momento lindo por los sentimientos que uno va a encontrar”, pero debe “tomarlo con una responsabilidad importante”. “En este momento estoy defendiendo a Estudiantes y hay que hacerlo con el mayor profesionalismo posible. Voy a ir a Nacional agresivo como siempre lo fui y tratando de dar lo mejor por mi equipo”, agregó.
Sobre la posibilidad de volver a la selección uruguaya, a la que únicamente defendió a nivel sub-20 cuando fue campeón sudamericano y semifinalista en el Mundial de 2017, dijo que “el sueño de todo jugador uruguayo es jugar en la selección”. “Ese sueño no me lo quitará nadie. Compartí con varios jugadores que hoy están en la mayor y nuestra generación dio que hablar. Ojalá algún día pueda llegar, pronto o después”, concluyó.