El rompimiento de la burbuja sanitaria por parte de Peñarol y Nacional la pasada semana, que derivó en la postergación de sus partidos ante Defensor Sporting y Deportivo Maldonado, generó un enorme malestar en casi todos los clubes restantes. Entendían que los grandes debían jugar con juveniles luego de que sus planteles rompieran el protocolo abandonando la concentración tras jugar por la Copa Libertadores.
El asunto pasó por la Mesa Ejecutiva de Primera División y se laudó con un 3-2. Ernesto Vergara, oriundo de Cerro y presidente del órgano que se encarga de las fijaciones, votó a favor de mantener la fijación, y en la misma línea alzó su mano Emilio Fernández (Plaza Colonia). José Ramos, de Boston River, y los representantes de los grandes (Jorge Campomar y Aldo Gioia), pusieron el 3-2 en el partido de escritorio.
Las razones
“Quedé triste”, dijo Vergara al programa 100% Deporte, de Sport 890, al ser consultado por su sensación después de consumada la suspensión de los partidos en cuestión, aunque descartó que exista “mala intención” de parte de los representantes de Nacional y Peñarol porque “la situación no es blanco o negro”. También desechó la idea de renunciar al cargo por este episodio.
“Es confusa la decisión de las autoridades sanitarias. A diferencia del partido Liverpool-Nacional, que fue una situación diferente y establecieron que Nacional no podía salir de la burbuja y participar del partido, en este caso indicaron una cuarentena sin explicar las razones, aunque a mi juicio es claro que fue como consecuencia de no haber respetado lo que estaba establecido”, expresó Vergara.
“Tampoco dice que (los planteles) no pudieran salir. Sólo dice que tienen que tener un aislamiento de siete días, pero no dice que no puedan salir a participar de un partido”, agregó el presidente de la Mesa Ejecutiva, quien justificó su postura al decir que “hay algunos elementos en el protocolo firmado que autorizan la participación, más allá de ese aislamiento”.
La molestia de Defensor y el peligroso antecedente que se marca
Por otra parte, dijo que “no es fácil la comunicación con las autoridades sanitarias” y que se buscó autorizar a los jugadores de Nacional y Peñarol haciéndoles un hisopado el pasado viernes, pero desde el Ministerio de Salud Pública se descartó esa posibilidad.
Sobre la molestia de Defensor Sporting por la situación, que llevó a los violetas a emitir un durísimo comunicado contra la Mesa Ejecutiva, opinó que “el fútbol es el fútbol y es respetable”. “Entiendo perfectamente que se sientan molestos porque están en todo su derecho. Me siento molesto yo, que no soy parte directa, así que los entiendo”, sostuvo.
Se explicará las razones a los clubes afectados, sabiendo que la decisión generó un antecedente peligroso. “Hay otros clubes que van a competir en torneos internacionales y se abrió una puerta para decir: ‘Yo violo la burbuja que está dispuesta y juego cuando se me ocurra’. Creo que es el gran tema a solucionar. Hoy está prevista una reunión con autoridades del MSP para clarificar todo y ver cómo funcionará en el futuro”, finalizó.
“El MSP aplicó a rajatabla lo que dice el protocolo”
José Ramos, quien votó en el sentido opuesto y se unió al planteo de los grandes, explicó que su decisión se basó en que “el MSP aplicó a rajatabla lo que dice el protocolo, y no fue porque (Nacional y Peñarol) rompieron la burbuja, sino porque tienen que estar en una burbuja como tendrán que estar Peñarol, Liverpool y River Plate”, que son los que jugarán esta semana en el exterior.
“En la mañana del viernes tuve acceso al protocolo que se firmó por los clubes que participan en competencias de la Conmebol. Dice que los clubes que juegan por el torneo local deben quedar aislados por siete días, y al cabo de esos siete días se les hace un PCR y quedan habilitados al salir. En el caso de los que llegan del exterior se les hace un PCR al llegar, se aíslan siete días y después otro PCR”, argumentó.
“En este caso el MSP ordenó una cuarentena al plantel de Peñarol hasta el martes 27 y al de Nacional hasta el miércoles 28. Se instaló eso de que acá se está premiando por incumplir, pero el incumplimiento de la cuarentena no lo evalúan la AUF ni la Mesa Ejecutiva”, señaló Ramos, quien adelantó que buscarán cambios en el protocolo para evitar que estas situaciones se repitan.
El representante de Boston River en la Mesa Ejecutiva entiende que si se vuelve a aplicar de manera estricta ningún club podrá jugar el fin de semana siguiente a haber disputado un partido por un torneo internacional como local, pero sí cuando vuelvan del exterior. “Una cosa la dice en la página 6 y otra en la 9”, explicó.
“Lo que está escrito es que los equipos deben hacer cuarentena por siete días y es lo que les ocurrirá a Peñarol, Liverpool y River Plate en dos semanas si esto no se cambia. Estaremos en el mismo punto y mi voto será que ninguno de los tres juegue”, señaló, y se mostró indiferente a las críticas de Defensor Sporting por entender que “cualquier decisión que se tomara iba a generar que alguien se molestara y sacara comunicados”.