Se enfrentaron los dos polos del campeonato: el super puntero de la Premier League, Liverpool, ante el peor equipo del certamen, el Watford. Sin embargo, le costó y mucho a los dirigidos por el alemán Jurguen Klopp para quedarse con el triunfo.

Tal es así que el primer gol del juego llegó a los 38'. Atacaba el Watford, pero salió de contra el Liverpool. Firmino dio un gran toque que lanzó en velocidad a Mané, quien la jugó con Salah. El egipcio corrió por el sector izquierdo, frenó y dejó en el suelo a su marcador para definir de forma magistral al segundo palo de Foster. Un verdadero golazo.

En el complemento Watford contó con sus oportunidades, pero siempre se encontró con el arquero Alisson, quien fue el gran responsable de que los Reds terminaran con su valla invicta.

El tanto de la tranquilidad llegó a los 90. Mané desbordó y levantó un centro rastreo que dio en un defensor de Watford, la pelota le quedó servida Origi para definir, pero le pegó tan mal que el balón fue hacía Salah y el egipcio ensayó un taco excepcional para establecer el 2-0.

Con este resultado Liverpool estiró su diferencia con sus perseguidores, quienes aún deben jugar. Mientras que Watford se hunde cada vez más en el fondo de las posiciones.