Diego Polenta, capitán de Nacional, se detuvo a hablar con Punto penal y Polideportivo a la salida del entrenamiento tricolor este domingo y si bien opinó que el parate en el fútbol “fue positivo para trabajar” desde la óptica de Nacional, no olvida “la lucha ni por qué se paró”.

“Fue una causa justa y ahora, por lo que parece, se va a levantar el paro y ya estamos enfocados en el jueves”, señaló, deseando que se reanude la actividad “por los jugadores y por la gente, que está sufriendo por no tener fútbol”.

Polenta fue de los que más se involucró públicamente con la causa, pero no cuestiona a los jugadores que mantuvieron un perfil más bajo porque “es difícil opinar y estar”. “Yo me involucré y hablo cuando realmente lo siento, y capaz que otros colegas no, pero apoyaron en todo momento. Me siento tranquilo y respetando todas las posiciones, que son válidas”, dijo.

“No estoy satisfecho del todo porque paramos por algo que todavía no logramos”, señaló en referencia a la aprobación de un nuevo estatuto del futbolista. “Hay que seguir trabajando y negociando. Lo único que me deja satisfecho es que los colegas de la B van a ganar un poquito más. Sigue siendo poco, pero algo ayuda”, expresó.

Volviendo a Nacional, dijo que se trabajó “en todo en general” y que hubo autocrítica tras el último resultado, que fue 0-0 con Plaza Colonia. “Hablamos entre nosotros y somos conscientes de que tenemos que trabajar. Me deja contento cómo se trabajó en estos días y habrá que ver el jueves cómo estamos”, indicó.

El jueves Nacional se medirá con Racing, un rival que “cambió de entrenador, que es una ayuda para cuando las cosas no están saliendo”. “Veo un equipo que ya nos hizo sufrir en el Centenario cuando jugamos contra ellos. Será un lindo partido y un rival difícil”, vaticinó.

“Estamos en Nacional y estamos obligados a ganar todo lo que juguemos. Para nosotros no hay mañana. A partir de ahora será un campeonato muy parejo y duro”, dijo, y se refirió a la reunión con el presidente Alejandro Balbi el pasado 4 de setiembre, un día después del último partido oficial.

“El mensaje fue claro. Hicimos la autocrítica que teníamos que hacer. Los que salimos a la cancha somos nosotros y creo que somos los responsables. Estuvo buena la charla y el parate también porque no veníamos bien”, concluyó.