Cruzeiro empató 2-2 en su visita al Gremio este domingo y sigue siendo cómodo líder del Brasileirão B con 10 puntos de renta respecto a su rival de turno y al Bahía, que comparten el segundo puesto. Ascenderán cuatro, y con 13 jornadas por delante le lleva 18 unidades de ventaja al quinto, que es un tal Tombense.
Paulo Pezzolano, entrenador del Cruzeiro, fue expulsado nuevamente pese a que había prometido a sus jugadores que no volvería a pasar. Le había ocurrido por última vez hace un mes frente al CSA, pero en esta ocasión tenía algo más que un as bajo la manga: un grabador debajo de la ropa.
“La grabación es para un documental que saldrá de Cruzeiro más adelante y ya sirvió para eso. De hecho, hoy no le falté el respeto a nadie”, explicó en rueda de prensa. Antes, cuando salió del campo tras ver la tarjeta roja, mostró el micrófono que tenía guardado y advirtió: “Por suerte tengo todo grabado. No le dije nada”.
“Ya le dije al árbitro que me enojé porque Luvannor se tiró al suelo y el árbitro me expulsó. El cuarto árbitro sabe por qué estuvo cerca. Puede decir que levanté el brazo, pero lo levanté por mi jugador que se tiró al suelo. Eso no me gusta. Pero ellos piensan que es todo para ellos”, explicó el Papa.