El pasado mes de octubre, Peñarol fue multado por la Conmebol con US$ 200.000 por cometer once infracciones del Código Disciplinario y Manual de Competiciones de la Copa Libertadores durante el partido con Flamengo en el Campeón del Siglo por los cuartos de final, pero además fue advertido por si volvía a pasar.

La Confederación Sudamericana de Fútbol comunicó al club carbonero que, en caso de reiterarse cualquier infracción de igual o similar naturaleza, la Comisión Disciplinaria podría volver a sancionar con, por ejemplo, el cierre parcial o total del estadio para sus siguientes tres partidos en condición de local.

Y sucedió. Los hinchas aurinegros recibieron a sus jugadores en las semifinales de vuelta contra Botafogo a pura pirotecnia y, por ese motivo, el ente rector del fútbol sudamericano notificó a última hora de este martes a Peñarol de la dura sanción que le aplicó, la cual regirá para la Copa Libertadores del próximo año, según informaron a FútbolUy fuentes del club.

Peñarol recibió una de las sanciones más fuertes que se le podía aplicar: deberá jugar sus tres partidos de local de la fase de grupos a puertas cerradas y, además, fue multado con US$ 263.000 (dinero que es descontado de los premios que otorga Conmebol).

Además, el arquero Washington Aguerre fue multado con US$ 15.000 por la infracción del artículo 11.2 literal q) del Código Disciplinario de Conmebol, que constituye “causar daños”.

El club apelará la decisión. En la mañana de este miércoles los dirigentes solicitaron los fundamentos del fallo y una vez los reciban, que se estima que sea en aproximadamente 10 días, tendrán siete días para apelar.