Este jueves, Peñarol visita a Flamengo en Río de Janeiro por la ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores. Para ese partido, unos 2.000 hinchas aurinegros se harán presentes, por lo que el club comunicó detalles del operativo, ya que “es un viaje con riesgos”, teniendo en cuenta el antecedente de 2019.

En esa ocasión, en la tarde previa al encuentro, se registró una riña entre hinchas de ambos clubes en la playa y acabó con el posterior fallecimiento de un “torcedor” del Mengão y arresto de un parcial carbonero. “Cada hincha es responsable de sí mismo y debe tomar todas las previsiones necesarias para su cuidado”, expresó hoy Peñarol.

Habrá un primer punto de encuentro de los ómnibus que llegarán a la ciudad brasileña desde Uruguay y desde ahí serán acompañados hasta un camping que fue gestionado por el club, donde se encontrarán todos los hinchas para salir hacia Maracaná a las 14:00 horas. Podrán ingresar a partir de las 6:00.

Peñarol ya pagó el ingreso al camping de todos los hinchas, al igual que por la contratación de los ómnibus para el traslado hacia Maracaná. A las 14:00, los ómnibus partirán hacia el estadio y el objetivo es que a las 16:00 todos los hinchas mirasoles hayan ingresado. Se realizarán espirometrías al ingreso.

Al término del partido, el público de Peñarol deberá esperar que se retire la hinchada de Flamengo. Los ómnibus que llegaron desde Uruguay serán escoltados hasta la salida de Río de Janeiro y los contratados por el club llevarán al resto de parciales hasta el aeropuerto de Caleão.

Únicamente se admitirá el ingreso de seis banderas, según lo acordado por la institución con las autoridades brasileñas; estas serán llevadas por la hinchada al estadio. Cualquier persona que arranque una butaca o dañe la infraestructura del estadio será detenida por la policía en la tribuna.