“Los errores estuvieron en los primeros siete minutos”, opinó Alfredo Arias, entrenador de Peñarol, tras la derrota por 4-1 visitando al América Mineiro por la primera fecha del grupo F de la Copa Sudamericana, y lamentó que “la diferencia estuvo en los dos goles tempraneros” anotados por Eder y Gonzalo Mastriani entre los 3’ y los 7’.
“Puedo hacer cualquier tipo de comentario, pero después de cometer esas desconcentraciones y errores que tuvimos y que el rival aprovechó, no hubo chance. Todo lo demás es difícil”, agregó.
“Después toda la explicación posible, táctica y técnica, queda en ir a buscar con ideas de juego, sí, pero con amor propio, y terminar desordenándonos, asumiendo errores y que ellos convirtieran. Después de esos primeros minutos, el equipo intentó y controló el juego, pero dos goles atrás está continuamente en la mente y el sentimiento del jugador. Es difícil después hacer algo claro y analizar algo”, dijo.
“Igual yo rescato que siempre quisimos y fuimos al frente. Cuando tuvimos la pelota en el primer tiempo controlamos el juego a través de ella y creamos, haciendo que el rival tuviera que replegarse y defenderse in extremis. Lamentablemente esos dos goles nos condicionaron”, reiteró Arias.
“Un equipo como Peñarol, que en todos lados tiene que salir a proponer, terminó proponiendo pero al mismo tiempo recibiendo castigos porque prácticamente el rival no erró. Cada vez que nos llegó, nos convirtió”, expresó el entrenador mirasol, consciente de que “hay que levantar la cabeza porque esto continúa”. “El domingo tenemos un partido importante por la competencia local. Esto es siempre a futuro, cuando ganás y cuando perdés”, concluyó.