España venció 5-3 a Francia en el alargue y se consagró campeón del fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de París, en un partido en el que los locales levantaron un 3-1 y forzaron el tiempo suplementario, pero finalmente Sergio Camello le dio el segundo título a su selección, que igualó a la francesa.
Los locales abrieron el marcador rápidamente cuando transcurrían apenas 10 minutos de juego, momento en el que Enzo Millot sacó un remate que, de manera increíble y con blooper incluido, el arquero español Arnau Tenas intentó despejar y terminó mandando la pelota hacia el fondo de su propia red.
La respuesta visitante fue inmediata, a los 17’, cuando Álex Baena colocó un pase al medio para Fermín López, quien infló la red con un disparo cruzado. Luego, a los 23’, Juan Miranda encontró con un centro desde la izquierda a Abel Ruiz, que remató, Guillaume Restes tapó y en el rebote nuevamente López convirtió.
En el minuto 27, Álex Baena se encargó de ejecutar un gran tiro libre a colocar desde el borde del área, que se metió en el fondo de la red francesa del arco de Restes, quien acompañó el movimiento de la pelota con su mirada, decretando el 3-1 parcial.
A falta de 12 minutos para el final, los franceses encontraron un gol que les permitió ilusionarse: precisamente a los 78’, Maghnes Akliouche, con un zurdazo de tiro libre que pudo ser perfectamente un buscapié, terminó descontando. Y, ya en tiempo adicional, Jean-Philippe Mateta anotó de penal el 3-3 y forzó el alargue.
Ya en tiempo suplementario, Sergio Camello, en el minuto 99 y en la última jugada del alargue, a través de dos definiciones sutiles muy similares en las que picó la pelota, se encargó de sentenciar el 5-3 y darle el oro a España, pese al esfuerzo de Francia.