Un incidente atípico se registró este sábado en el Nascar, durante las pruebas de clasificación en Martinsville, correspondientes al campeonato de la modalidad Late Model Stock.

Andrew Grady, quien se sintió perjudicado por Daver Callihan por un toque en su coche, se acercó a increparlo y, según su versión, recibió un gesto sobrador que no le gustó.

Grady enfureció y empezó a golpear a su rival hasta que un integrante del equipo de seguridad lo sacó. “Hay idiotas que no pueden manejar una máquina de cortar pasto y mucho menos una Late Model en Martinsville”, sostuvo después.

Callihan, por su parte, negó haber hecho un gesto fuera de lugar y se disculpó por su maniobra, aunque aclaró: “Estamos luchando por nuestras vidas ahí fuera. No se puede ceder ni un milímetro cuando hay 95 autos, así que hice lo que tenía que hacer”.