Nacional entrenó este domingo con la mira puesta en el partido del jueves ante San Pablo por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. De cara a ese duelo en el Gran Parque Central, Martín Lasarte preparó el equipo con un amistoso ante Boston River que terminó 3-0 el sábado en Los Céspedes.
El entrenador tricolor puso a Luis Mejía; Leandro Lozano, Sebastián Coates, Diego Polenta y Gabriel Báez; Lucas Sanabria, Christian Oliva y Mauricio Pereira; Antonio Galeano, Ruben Bentancourt y Jeremía Recoba.
Alexis Castro y Diego Zabala no jugaron por precaución, pero estarían a la orden el jueves en los lugares de Mauricio Pereyra y Jeremía Recoba. El otro cambio, que será definitivo, fue el ingreso de Ruben Bentancourt por el paraguayo Federico Santander.
Nicolás López, que se incorporó este sábado a los trabajos, contó que “venía entrenando” y que estará a disposición del cuerpo técnico. “Hace mucho no hago fútbol pero me siento bien. Que el técnico decida”, dijo el Diente este domingo ante las cámaras de Punto Penal y El Polideportivo.
“Hablé con Martín [Lasarte]. Fue frontal y los dos estamos de acuerdo en ir al banco y, si se da el partido, entrar un ratito”, comentó López, cuya última presencia oficial con el León de México data del 27 de abril, cuando entró a los 84’ en un 1-1 contra Juárez.
“Cada vez que vengo a Nacional es un sueño, como para cualquier persona. Estoy cumpliendo otro sueño de volver y competir en otra Libertadores”, dijo el delantero de 30 años, quien llegó a pensar que el retorno al club de sus amores se caía “en los últimos tres días porque se avanzaba y después se trababa”.
Por último, reconoció que tendrá que adaptarse al balón por encontrarlo diferente al que venía utilizando en México. “La pelota es diferente. Me va a costar un poquito adaptarme, pero hay tiempo. La encontré un poquito más pequeña”, concluyó.