Nacional: “Lo que más perdemos en esta situación es el toque de pelota”, contó Laborda

El fútbol uruguayo se encuentra parado debido a los brotes de coronavirus. Los clubes buscan la manera de seguir en contacto con sus jugadores para poder pasarles las distintas rutinas de entrenamientos para que hagan en sus hogares.

El defensor Mathías Laborda habló con Quiero fútbol, en la Sport890, sobre cómo está trabajando Nacional esta situación de aislamiento social: "Hacemos entrenamientos virtuales tres veces a la semana y los demás días nos pasan rutinas para hacer en nuestras casas".

Laborda aseveró que se extraña "ir a Los Céspedes, tomar mate con los compañeros y estar en contacto con ellos. Sin embargo, la vamos manejando con las redes sociales para poder sobrellevar esta situación".

Laborda, de 20 años, se afianzó en la primera de Nacional de la mano de Álvaro Gutiérrez. El defensor comentó las diferencias de juego que poseen "Guti" y el actual director técnico tricolor, Gustavo Munúa: "Hubo un gran cambio porque Gustavo nos pide que nos plantemos en la mitad de la cancha, que salgamos a buscar más, pero sin que nos regalemos".

El zaguero que participó del Preolímpico Sub-23 se refirió que es lo más complejo que deben aprender con respecto al juego que les pide Munúa: "Se nos complica mantener la línea del fondo alta. Cuesta sacarse el chip de tirarse para atrás".

Laborda fue contundente y dejó en claro cuál será el aspecto que perderán debido al aislamiento social y el no poder entrenar en una cancha de fútbol: "Lo que más perdemos en esta situación es el toque de pelota".

"Fue un gran cambio llegar a la primera de Nacional", dijo. "Había estado el Sudamericano Sub-20 (2019), pero no tuve minutos. Sin embargo, volví al club y al poco tiempo se fue Eduardo Domínguez, vino Álvaro (Gutiérrez) y ahí comencé a jugar", agregó.

Por último, contó que significó ser campeón uruguayo con el tricolor: "La verdad fue impecable el título que obtuvimos. Si bien fui campeón de la Copa Libertadores Sub-20 con Nacional y el Estadio Centenario lleno, pero hacerlo en primera, por como se había dado todo y en un clásico fue algo increíble".