“Se notó durante la mayor parte del partido que estuvimos mejor parados, interpretando mejor las diferentes facetas del juego. Fuimos justos merecedores de los tres puntos”, dijo el defensor Guzmán Corujo a Nacional TV tras la victoria tricolor por 2-0 sobre Peñarol en el Gran Parque Central este domingo, resultado que dejó a los albos primeros en el Torneo Apertura.

Cree que este clásico será recordado y “quedará para la historia” porque “hace mucho tiempo que no se jugaba en el Parque, porque se ganó con autoridad y pisando fuerte, y también por otras situaciones que ocurrieron”. “Y porque no hay gente en la tribuna. Se normalizó porque hace tiempo venimos jugando así, pero lo sentimos porque la hinchada para nosotros es un jugador más y hoy se hizo sentir desde otro lado, en el camino y con mensajes”, comentó.

“Era importantísimo conseguir el triunfo hoy, no sólo por la disputa de la punta, sino porque era un clásico especial que puede marcar lo que será ese duelo por la Copa Sudamericana. Estamos contentos pero sin sacar los pies de la tierra y con los objetivos claros, mirando de reojo lo que será el duelo por la Sudamericana”, señaló.

“Hoy toca disfrutarlo y mañana quizás un poco, pero después hay que limpiar la cabeza porque el domingo volvemos a jugar por el Apertura (frente a Montevideo City Torque a las 18 horas en el Franzini) y sabemos que necesitamos esos tres puntos para seguir primeros”, agregó el defensor central de 24 años, quien sobre un total de nueve clásicos oficiales ganó cuatro, empató cuatro y perdió sólo uno (el primero por la Supercopa Uruguaya 2018).

Ante las llegadas de Sergio Rochet, Brian Ocampo y Camilo Cándido a pocas horas del encuentro, destacó “la actitud que tuvieron” y su “profesionalismo” porque “es muy difícil sacarse de la cabeza la eliminación de una Copa América, que era una ilusión muy grande”, y “dormir poco, meterse en el partido y cambiar el chip”. Además, resaltó la postura de quienes tuvieron que salir del equipo ante los retornos de los hombres de la Celeste.

“Es una situación inesperada pero tenemos un grupo de laburo que da gusto. Todo el mundo sabe qué rol ocupa y esas cosas al fin y al cabo son las que llevan a conseguir los resultados. Seguro que los compañeros que iban a ser titulares y a los que les tocó salir del banco se deben haber calentado cuando les dieron la noticia, pero después estaban llenando de energía al grupo para el objetivo común y todos estamos tirando para eso”, ponderó.