Sergio Rochet llegó a Uruguay este jueves de madrugada tras un extenso viaje desde Asia. “Ya estamos cambiando el chip y nos ponemos al día. Mañana (jueves de mañana) ya me toca estar entrenando y preparado para el clásico del sábado, que será una final para ambos”, dijo el arquero de la selección uruguaya y de Nacional.
“Me tocó viajar y justo hubo cambio de entrenador en el medio. Hay muchas cosas por hablar y ponerme al tanto con el Guti (Álvaro Gutiérrez), pero el grupo está muy bien. Sigo en charlas con jugadores y veo el ambiente que hay en Los Céspedes”, agregó el capitán del equipo tricolor.
Pensando en el duelo del sábado frente a Peñarol en el Campeón del Siglo, augura un “clásico muy parejo y disputado”. “Nos jugamos mucho. De los últimos clásicos es uno de los que va a marcar mucho lo que va a ser el año. Hay que prepararnos mentalmente muy bien”, añadió.
“Ambos equipos tenemos muy buenas virtudes y trataremos de encontrar las debilidades en el rival y usarlas a nuestro favor. Va a ser un partido muy trabado”, reiteró Rochet, quien fue consultado por Matías Arezo, a quien enfrentó dos veces con un saldo de dos triunfos (2-0 de visita y 3-0 de local) y una derrota (2-0 en el Saroldi con un golazo de tiro libre del 9).
“Debemos tener precaución porque sabemos que ante la mínima falla lo podemos pagar caro. Es un jugador que tiene una virtud de que, cuando menos lo esperás, saca un remate al arco. Hay que tratar de incomodarlo y no dejarle espacios, pero sabemos que Peñarol no solo gira alrededor de Arezo. Hay otros jugadores desequilibrantes”, concluyó Rochet.