Los Dallas Mavericks igualaron este domingo 2-2 su semifinal del Oeste ante los Phoenix Suns con una victoria por 111-101 cimentada en su espléndido acierto en los tiros de tres puntos (14 de 24 en la primera mitad) y la floja actuación de Chris Paul en el equipo que terminó la fase regular de la NBA como el mejor.

Solo dos días después de cumplir 37 años, el base de los Suns fue eliminado por faltas cuando quedaban nueve minutos por jugarse del último cuarto tras un partido para el olvido en el que solo sumó cinco puntos, cinco rebotes y siete asistencias en nada más que 23 minutos en cancha debido a sus problemas con las personales.

Al descanso ya llevaba cuatro faltas, algo que no le había sucedido jamás en sus 17 temporadas en la NBA. Frente a la pesadilla de Paul, Dorian Finney-Smith vivió su tarde soñada en los Mavericks con 24 puntos y un tremendo 8/12 en triples.

Luka Doncic consiguió 26 puntos, siete rebotes y 11 asistencias, pero quizá la señal más esperanzadora para el futuro de la serie de Dallas es que no necesitaron una versión sobrehumana del esloveno en la anotación para llevarse este cuarto encuentro.

Además de Finney-Smith, los Mavericks, que terminaron el encuentro con 20/44 en triples, contaron con aportaciones de gran calidad de Jalen Brunson (18 puntos) y Davis Bertans (12 puntos con 4 de 6 en triples).

Sin Paul a su lado, Devin Booker (35 puntos y 7 asistencias) fue el referente de unos Suns que ganaron sus dos partidos en casa, que perdieron los dos encuentros de Dallas y que tendrán la opción el martes de vuelta en Phoenix de retomar la ventaja en esta semifinal sin perder la ventaja de localía.

Los Sixers también están 2-2 ante los Heat

Con Joel Embiid y James Harden en la cancha, la vida es mucho más fácil para los Philadelphia 76ers, que este domingo vencieron por segundo partido consecutivo a los Miami Heat (116-108) de un enorme Jimmy Butler para empatar 2-2 esta semifinal del Este.

Tras no jugar por lesión los dos primeros encuentros de la serie (dos victorias de los Heat), Embiid, todavía con una máscara protectora en la cara, dio un gran impulso a los Sixers en sus dos triunfos seguidos en Filadelfia y este domingo sumó 24 puntos y 11 rebotes.

No obstante, la pieza imprescindible de los Sixers en este cuarto partido fue Harden, que había sido criticado por su discreta labor en los anteriores encuentros y que este domingo se reivindicó con 31 puntos (6 de 10 en triples), siete rebotes y nueve asistencias. Además, aportó 16 unidades en el último chico, incluyendo cuatro triples en seis intentos.

Los Heat, el conjunto con el mejor balance del Este en la temporada regular, contaron con un Jimmy Butler fabuloso que consiguió 40 puntos (13 de 20 en tiros) y seis asistencias.

Sin embargo, el equipo de Erik Spoelstra se desangró desde el triple con un triste 7/35, se vio superado en muchas partes de la velada por la defensa local, y echó en falta la mejor versión de jugadores fundamentales en su esquema como Tyler Herro (11 puntos con 4 de 12 en tiros) o Kyle Lowry (6 puntos con 3 de 10 en tiros).

Esta semifinal del Este regresa ahora a Miami, donde el martes se jugará el quinto partido.

EFE / FútbolUy