La noche que Joel Embiid recibió ante su familia y los hinchas de los Philadelphia 76ers su trofeo de MVP de la temporada, los Boston Celtics le amargaron la fiesta al pívot camerunés al ganar a los Sixers por 102-114 para tomar ventaja 2-1 en la serie de semifinales.
El interno terminó el partido como el máximo anotador, con un doble-doble de 30 puntos y 13 rebotes, además de tres asistencias y cuatro tapones. Pero sin la aportación de James Harden, que tuvo una mala noche en la que sólo anotó dos de los siete triples que intentó y uno tiro de siete lanzamientos de dos, el pívot se agotó en un intento inútil.
Harden, que durante gran parte del encuentro se mostró indeciso y sin confianza ante el aro, concluyó la noche con 16 puntos gracias a ocho tiros desde la línea de las personales. Tyrese Maxey tampoco tuvo un buen partido, con 13 puntos tras nueve intentos de triples y siete tiros de dos.
En los Celtics, Jaylen Brown y Jayson Tatum fueron incansables. Brown aplicó una defensa pegajosa a Harden desde el primer segundo del partido que descolocó al base de Filadelfia. Brown anotó 23 puntos, siete rebotes y cinco asistencias.
Tatum hizo un doble-doble con 27 puntos y 10 rebotes a pesar de que sólo anotó tres de los 11 triples que intentó. Su compañero Al Holford fue el más efectivo desde más allá del arco con cinco triples de siete intentos. El pívot dominicano sumó 17 puntos y siete rebotes.