La Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales aspira a la aprobación de un nuevo estatuto del jugador y negocia con la Asociación Uruguaya de Fútbol y los clubes por el aumento de los salarios mínimos de la Segunda División Profesional.
Según explicó Diego Scotti, presidente de la gremial de jugadores, al programa 100% deporte de Sport 890, había una reunión la pasada semana para cerrar el acuerdo, dentro de una nueva instancia de negociación, pero se postergó. Siguen esperando una devolución final, pero la paciencia está próxima a agotarse.
“Era lógico que en los puntos más conflictivos nos íbamos a trancar, que es donde estamos ahora. Aguardábamos la devolución final la semana pasada y nos sorprendió la postergación de la reunión. Entiendo que los clubes deben discutir algunos puntos en su ámbito”, comentó, y espera concretar una nueva reunión para el jueves.
“De no ser positiva o acercarnos en puntos que estamos distantes, seguramente se tomen medidas porque hemos dado plazos más que suficientes. Sabiendo que no será fácil, hay que ser optimistas”, indicó, y no descartó un paro de actividades, más allá de aclarar que “sería la última opción”.
Desde los futbolistas percibió “un gran compromiso por el tema” y “una gran preocupación” por el “aumento de los salarios en la B, la divisional más castigada y con muchas dificultades en condiciones y sueldos”. “No es un salario acorde con el fútbol profesional ni lo que implica nuestra profesión, donde no cobramos aguinaldo ni salario vacacional. Es poco estable y todos los contratos vencen en diciembre”, recordó.
“Consensuamos el año pasado un aumento en etapas y ahora, en la última propuesta que se nos presentó, no aparece el aumento en etapas que estaba previsto el año pasado. Ahí está nuestra mayor preocupación de cómo llegar a cumplir con lo solicitado”, agregó.
Scotti aclaró que la Segunda División Profesional “ha mejorado” en condiciones, en parte por el empuje de la Mutual, que tomó “un rol proactivo para que eso sucediera”. “Encontramos desde la AUF un buen aporte. Los jugadores de la B están jugando prácticamente la misma cantidad de partidos que los de la A, cuando antes había una diferencia muy grande”, valoró, pero aclaró: “Es hora de plantarnos e ir por mejoras, que son salarios mínimos”. “El dinero que cobramos no alcanza”, reconoció.
“Podemos ir a un paro y la preocupación es de todos, pero esperemos llegar a un acuerdo. Veo una voluntad política pero estamos a la espera de una devolución final”, añadió Scotti, quien sostuvo que a “nivel mundial”, por un estudio de FIFPro, “el 60% de los futbolistas cobra por debajo de 1.000 dólares y no es ajeno a Uruguay”.
A continuación, lo publicado por la Mutual el pasado 7 de agosto respecto a la actualización de los sueldos.