Este viernes, la Mutual Uruguaya de Futbolistas Profesionales, que hoy está cumpliendo 73 años, publicó un video en su canal de YouTube donde se posicionan en contra de la televisación.
"Durante muchos años nos han dicho que el fútbol uruguayo es pobre", comienza diciendo. "Bajo esa prédica falsa y comercialmente intencionada se ha condenado al fútbol a un retraso en infraestructura, salarios, salud, tecnología, malos resultados internacionales y condiciones de formación de los jóvenes que ya no se recuperarán", añade.
"Es necesario cambiar esta dinámica negativa que perjudica a los futbolistas, a los clubes y a los hinchas. Debido a los acuerdos actualmente vigentes, y de acuerdo a los valores de mercado, el fútbol uruguayo ha dejado de ganar más de US$ 180.000.000 en los últimos diez años", indican, y dicen que esto provocó "espectáculos menos atractivo para el hincha".
Sobre el dinero recibido, aclaran que "cada año, el sistema de clubes y fútbol profesional recibe un apoyo económico de US$ 5.000.000", pero "de este apoyo, solo US$ 1.200.000 es generado por el propio sistema, mientras que US$ 3.800.000 proviene de FIFA, Conmebol y de la selección nacional".
"La selección nacional ha distribuido más de US$ 15.000.000 al sistema de clubes en los últimos ocho años, demostrando que la gestión directa de los activos beneficia al sistema", siguen.
"Se dice que Tenfield es la única empresa que pone dinero y esto es falso", aseveran. "El dinero lo aportan los hinchas yendo a la cancha y a través de su abono de cable que transmite los partidos. Tenfield es solamente intermediario y productor", apuntan.
Afirman que "mientras en el mundo los clubes reciben el 65% de la torta generada, en Uruguay reciben solo el 28%, el resto se lo embolsa el intermediario", y "en el actual sistema, la empresa que televisa reparte US$ 12.000.000, eso se traduce en US$ 450.000 al año para cada equipo. US$ 37.500 mensuales, una cifra con la que ni siquiera se puede pagar los salarios mínimos de un plantel".
La Segunda División Profesional recibe "menos de US$ 10.000 mensuales para cada club". "Esto obliga a la mayoría de los clubes a pedir adelantos, por lo que quedan en una situación de dependencia que muchas veces los obliga a ceder en la venta de futbolista y a devolver bajo la forma de favores políticos", continúan.
Cuentan que "a partir de 2017, la AUF recuperó los derechos de indumentaria de la selección. Con el nuevo acuerdo, la selección cobra, de Puma, US$ 22.300.000 en seis años, es decir, US$ 3.717.000 cada año". A esto se le suman "US$ 2.000.000 cada año que vienen de los patrocinios de distintas marcas, que la AUF negocia directamente".
"Esto ha sido gracias a la participación de los futbolistas en las negociaciones", aseguran, pero esto nos dice que "es posible una distribución más equitativa de los ingresos, menos abusiva y más ajustada a los valores de mercado".
Esto tendría "un impacto altamente positivo en la calidad del fútbol, en los futbolistas y en la economía de la AUF, y también en el espectador, que recibe un mejor espectáculo de los pies e un equipo más competitivo".
"Para que esto ocurra, es necesario que los futbolistas participen en la gestión directa de lo que genera su trabajo. El fútbol uruguayo podría crecer si los futbolistas, los clubes y las instituciones relacionadas contaran con mejores presupuestos", agregan, y cierran: "El fútbol uruguayo no es pobre, lo hacen pobre los acuerdos injustos".