Boca Juniors se coronó campeón de la Liga Profesional del fútbol argentino en un final infartante, a dos canchas en simultáneo y plagado de emoción. Pese a empatar 2-2 con Independiente, terminó dos puntos arriba de Racing, que cayó 2-1 con River Plate.
Un penal atajado por el arquero millonario, Franco Armani, en el minuto 90 a Jonathan Galván cuando en Avellaneda estaban 1-1 impidió a la Academia ponerse en ventaja y celebrar el título. Luego, Miguel Borja selló la remontada riverplatense con su segundo tanto.
Tras el partido, Marcelo Gallardo, entrenador de River Plate, valoró lo realizado por sus dirigidos “en un país donde todo se sospecha de todo, donde todo está tan cruzado, donde todo es tan mezquino y donde todo parece vacío de valores”, considerando que en la previa se especuló con que los millonarios entregarían el partido.
“Nosotros desde el fútbol demostramos que se puede tener respeto y dignidad por la profesión, por el fútbol y por la pasión que nos genera a todos nosotros este deporte. Entiendo si hay hinchas enojados o frustrados, pero la manera que tenemos de representar y transmitir es a través de esos valores, que van más allá de ganar o perder. Es la dignidad del sentimiento hacia lo que somos”, dijo.
“Estoy contento y orgulloso de sentir eso, más allá de haber beneficiado a nuestro eterno rival. Es de orgullo tener esta paz interna. Más allá de nosotros no tener un año bueno futbolísticamente, sí tuvimos un proceso enorme de muchísimas cosas vividas. Y por cerrarlo de esta manera, sin nada en juego pero teniendo que resguardar nuestra integridad y nuestros valores, estoy feliz”, concluyó.