Marcelo Bielsa: el “sentimiento de agradecimiento” a los jugadores y los puntos a corregir

Uruguay rompió una racha de 22 años sin poder ganarle a Brasil al imponerse este martes en el Estadio Centenario por 2-0 con goles de Darwin Núñez y Nicolás de la Cruz. Luego del encuentro, Marcelo Bielsa aseguró: “Tengo un sentimiento de agradecimiento muy grande hacia los jugadores. Todos vimos cómo lucharon, protegieron y buscaron el resultado, así que muy agradecido por la alegría que nos dieron a todos”.

“Defensivamente el partido fue bueno. No es sencillo evitar situaciones de peligro contra los atacantes que tiene Brasil”, dijo en conferencia de prensa, y añadió sobre los puntos negativos del equipo: “Compartimos mucho la pelota. En el primer tiempo ellos circularon con alguna facilidad y nos costaba presionar, me hubiera gustado aumentar la cantidad de recuperaciones en campo rival, que no las tuvimos como quería. Atacamos mucho a través de la recuperación de la pelota, y si la recuperación es alta, es más fácil. Debemos corregir cómo quitarle la pelota más rápido al rival”.

“De los cuatro partidos que jugamos, esta victoria es distinta a la anterior. Jugar contra Brasil presupone una dificultad añadida, así que esta fue el punto más alto”, destacó. “La repercusión de las victorias es según a aquello que se consigue al obtenerlas, y en la cuarta fecha de unas Eliminatorias ganar un partido como este es una alegría muy grande, pero las victorias se valoran según el logro que permiten conseguir. Acá no se consiguió ningún logro”, ahondó.

Consultado sobre el cambio posicional de Manuel Ugarte para el segundo tiempo, explicó que “ellos [Brasil] cambiaron la distribución de los jugadores de ataque. En el primer tiempo, Neymar jugaba por detrás de Gabriel Jesús y cuando entró Richarlison jugaron con dos centroatacantes. Era preferible que Ugarte marcara enfrentando a esos dos jugadores y no por delante de ellos. No fue demasiado importante, porque pasó de jugar por delante de los centrales a por detrás con movimiento constante”.

“Rodrygo se ubicaba en la izquierda del campo y eso obligaba a algún acomodo. Nos costaba lograr que los dos centrales no hicieran una distribución muy prolija de la pelota, circulaban y encontraban receptores que organizaban los ataques, que eran muy directos a nuestra línea defensiva”, expresó el director técnico argentino sobre el parado táctico.

Consultado por el cambio de juego de la selección con respecto a años anteriores, indicó: “La idiosincrasia o el modelo con el que un país juega al fútbol es una cosa muy importante. No se debe ignorar porque el modelo y el estilo se transmite de generación en generación, y más en un fútbol con tanta riqueza como el uruguayo. Lo peor que se podría hacer es no mirar hacia atrás y no valorar el procedimiento. Después están los matices, las características de los jugadores y lo que se puede intentar hacer a partir de ellos, pero lo más importante es que no debe ignorarse la marca registrada del fútbol de un país. Hay que construir a partir de eso”.

“Los cambios, cuando un equipo debe conformarse con una serie de jugadores diferentes a los que lo han hecho tan exitosamente durante más de una década, no son sencillos, pero hay muchos jugadores del equipo actual que han sido modelados por aquellos que han dejado de estar. Escucho el respeto y la gratitud con la que los jugadores hablan de los que han dejado de estar o de los ausentes momentáneos”, agregó, en referencia a los referentes que no fueron convocados desde que asumió.

Y cerró hablando de Argentina, el próximo rival: “Está dentro de un ciclo brillante, no solamente en los resultados, sino también en la vigencia del apetito por seguir ganando, por el tipo de fútbol que construye y por el recambio que está implementando. Esas cosas siempre agigantan la dimensión de una potencia; es un equipo y un ciclo lleno de virtudes”.