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Maratón: Nicolás Cuestas y su clasificación al Mundial con récord nacional: "dejé todo"

Los obstáculos superados, el juego mental en cada kilómetro, la molestia muscular y todo lo que venció para clasificar a su tercer Mundial

22.02.2022 18:02

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2022-02-22T18:02:00-03:00
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Nicolás Cuestas cumplió varios objetivos en la Maratón de Sevilla ya que no solo clasificó a su tercer mundial de atletismo, en este caso la cita de Oregon, Estados Unidos (15 al 24 de julio), sino que además batió por segunda vez el récord nacional de la competencia.

Cuestas, finalizó su actuación con un crono de 2:11:03, marca que bajó los 2:11:30 exigidos por World Atlhetics para llegar a la cita en tierras norteamericanas y que dejó por el camino su anterior registro regente de 2:11.42 conseguido en la Maratón de Valencia en 2020.

“Fue una carrera complicada”, contó el atleta de 35 años en charla con FútbolUy: “desde el primer kilómetro comencé con una molestia en el posterior izquierdo y siempre fui tanteando la situación. Me costaba correr porque no estaban bien las piernas, al cien por ciento, pero sí venía impecable de aire. Eso me ayudó enormemente, estar tan bien entrenado me dejó terminar la carrera”.

“Estar muy fuerte mentalmente fue clave, porque en pila de tramos sentía que quedaba sin fuerzas, o se me pasaba por la cabeza la posibilidad de parar”, reconoció el olímpico en Río de Janeiro 2016: “pero sabía que venía en tiempo para la mínima (al Mundial) y que tenía un margen si bajaba el ritmo en algunos kilómetros como me pasó”.

“Siempre que corres la maratón vas sacando cuentas en la cabeza, más cuando venís justo con la marca. Empezás a calcular los tiempos que hay que hacer para lo que falta y ver si te da o no”, explicó.

Repechando

Sevilla no fue fácil para Cuestas, que se sobrepuso a todas las adversidades para lograr un resultado histórico: “en el kilometro 25, venía corriendo con Andrés (Zamora, que terminó con 2:11.26 y también consiguió su lugar en Oregon) y cuando voy a agarrar la hidratación veo que, en el apuro, otros competidores la tiran. Ahí paré a agarrar la botella, él siguió con el grupo que veníamos y yo me quedé algo rezagado”.

“De allí en adelante empecé a remarla”, confesó y contó que transitó el camino con: “tres o cuatro atletas, tirando un poco cada uno”.

“En el kilómetro 38 pude alcanzar a Andrés y pasarlo. Ya en el cierre y con cercanía a la meta me sentí mucho mejor, venía bien e hice el último esfuerzo. Me relajé un poco porque sabia que me daba para conseguir la mínima”, expresó.

Récord y más

El fondista al ser consultado sobre la valía de volver a quebrar su propio récord nacional, contestó con tranquilidad: “era algo que se podía dar, esperable. Con Andrés (Zamora) estábamos en condiciones para correr por debajo de las dos horas y diez minutos”.

“Estoy contento con conseguirlo”, dijo más tarde y amplió: “es muy lindo poder mejorar la anterior marca casi por cuarenta segundos. Teníamos claro que con la mínima (al Mundial) íbamos a bajar el récord y estábamos los dos prontos para hacerlo. Lo tuve que pelear bastante, pero se logró y es fruto del trabajo que venimos haciendo. Es una competencia sumamente exigente, donde pasan muchas cosas y es un logro más alcanzado”.

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