Más allá del buen presente deportivo de Luis Suárez, la aparición del uruguayo en los medios brasileños se debe a su situación sanitaria, luego de rumores de retiro y un hecho incontrastable que ocurrió el domingo, cuando hizo un gol y pidió el cambio.

Los dolores en la rodilla derecha lo siguen teniendo a maltraer y planteó la posibilidad de viajar a España para ser atendido por Ramón Cugat, el médico de confianza que lo trató durante el pasaje por Barcelona, pero se quedará en Brasil a hacer un tratamiento conservador.

El club sugirió que el delantero permanezca en Porto Alegre y estará pendiente de cada movimiento, al punto tal que las partes acordaron no hablar del asunto hasta que no se tome una decisión definitiva sobre la hoja de ruta de la recuperación.

Desde el Gremio miden las consecuencias y saben que, si bien Suárez tiene contrato hasta diciembre de 2024, podría retirarse cuando finalice la temporada 2023. Desde el departamento sanitario hasta el legal, todos están al tanto y pendientes de cada movimiento.

El equipo dirigido por Renato Gaúcho volverá a jugar este sábado, cuando visite al Bahía por el Brasileirão. Tres días después jugará nuevamente ante el mismo rival por la ida de los cuartos de final de la Copa de Brasil.