Los remeros uruguayos Bruno Cetraro y Felipe Klüver recibieron su diploma olímpico, tras haber conseguido la sexta colocación en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio en la modalidad doble par ligero del remo.
El evento se realizó en las instalaciones del Club de Pesca Armonía, donde se hicieron presente entre otras autoridades, Álvaro Delgado, secretario de Presidencia, Julio Cesar Maglione, presidente del Comité Olímpico Uruguayo y Sebastián Bauzá, secretario Nacional del Deporte.
Maglione, a la hora de tomar la palabra, destacó lo conseguido por los dos celestes y mencionó: "fue importantísimo lo que hicieron estos dos grandes representantes del deporte nacional, es un premio al esfuerzo, convicción y alegría, que sumado a la dedicación y entrega terminaron marcando un mojón trascendente en la cita olímpica".
@BrunoCetraroOLY y Felipe Klüver con su diploma olímpico tras su estupenda actuación en Tokio, donde fueron sextos en #remo pic.twitter.com/ch07hQanYm
— Andrés Cottini (@A_Cottini) August 26, 2021
Bauzá en tanto expresó que: "es un día muy especial para todos los que amamos el deporte, porque marca el fruto de un trabajo incansable y sostenido en el tiempo, con dos deportistas convencidos del camino recorrido".
Además, destacó la labor de Fernando Ucha (presidente) y, desde él, a sus compañeros de Consejo Directivo de la Federación Uruguaya de Remo de los cuales aseguró: "no sale en las fotos, no habla en vano, pero cambió al remo, trajo lo mejor, entre ellos un entrenador como Osvaldo Borchi. Y así les fue".
Delgado en tanto, cerró la parte oratoria y expresó: "hay una doble satisfacción porque es un tema institucional y además, porque nos llenó de emoción y alegría escucharlos tras cada regata hablando del orgullo de representar a Uruguay. Eso tiene que ver con el esfuerzo, dedicación y compromiso de dejar a la celeste allá arriba".
Emocionados
Una vez recibidos los diplomas olímpicos y bajo el aplauso cerrado de todos los presentes, se vio a las claras la emoción de Bruno Cetraro y Felipe Klüver.
"Lo necesitaba tener en la mano para darme cuenta, en parte, de lo conseguido", comentó Cetraro: "es increíble lo mucho que luchamos para conseguir este resultado y la emoción de tenerlo plasmado en un diploma no tiene comparación".
Klüver, rápidamente comentó que lo iba a encuadrar y colgar en su casa: "que sirva como recuerdo de lo que pasó, de lo que somos capaces y de lo mucho que se va a venir por lo cual seguiremos luchando cada día".
Otro que estaba muy sensibilizado fue Osvaldo Borchi, entrenador de la dupla, que no pudo contener las lágrimas de alegría. Con diez Juegos Olímpicos en sus espaldas simplemente se limitó a decir: "el camino está en marcha, ahora no hay que parar de remar".