San Pablo recibió al Atlético Mineiro de Diego Aguirre en el estadio Cícero Pompeu de Toledo, en la ciudad de San Pablo, por el partido de ida de los cuartos de final de la Copa Libertadores.
Ambos equipos llegaron en la búsqueda del torneo continental, teniendo en cuenta sus malas actuaciones a nivel local.
San Pablo venía de eliminar por octavos de final al Toluca mexicano, con un global de 5-3, mientras que el Atlético Mineiro había dejado por el camino a Racing Club de Avellaneda, por un global de 2-1.
El trámite del partido tuvo varias cosas pero por sobre todo una primera mitad con abundancia de faltas y cortes de juego, con varios jugadores amonestados tempranamente y algunos otros perdonados por el árbitro central.
San Pablo arrancó mejor, apretando al Atlético Mineiro en su cancha, pero no con una efectividad mayúscula en comparación al rival. Si bien llegaba con mayor soltura, no eran unos minutos de mucha imaginación para Ganso, ni de mucha comodidad para Calleri.
De a poco el equipo de Aguirre se fue acomodando en la cancha y encontrando su mejor posición, con un Carioca apoderándose de la mitad de la cancha y lanzando por la zona del ataque derecho.
Pero a pesar de los espacios para cada uno, ambos se cortaban constantemente y se medían, limitándose más que provocándose.
San Pablo en esos cuarenta y cinco minutos tuvo sólo un cabezazo al arco que se fue por encima del horizontal, mientras que Mineiro tuvo un remate de lejos que contuvo el guardameta local Denis y un gol anulado a Pratto, por estar en offside. Además Aguirre debió sacar a Robinho por lesión muscular a los 37´, poniendo en su lugar a Hyuri.
La primera mitad terminó igualada sin goles y sin mucho espectáculo más que roces, especulaciones y amarillas.
El segundo tiempo el trámite se esclareció un poco más, con más espacios para ambos equipos para el contragolpe, aunque Atlético Mineiro tenía cierta superioridad en el control de la pelota y el despliegue. Tanto Carioca como Donizete en la zona media supieron adueñarse del sector e inclinar un poco la balanza hacia el arco de Denis, lanzando a Patric y Urso al ataque.
Por parte de San Pablo el punto alto estuvo en Maicon, el zaguero central que luego de mucha firmeza y categoría, salió sentido al minuto 74´ cediéndole el lugar a Diego Lugano.
Minutos antes el experimentado Michel Bastos había ingresado a darle un poco de claridad al equipo del Patón Edgardo Bauza, que no lograba adueñarse por completo.
Así, el zurdo recuperó aire y le dio un poco más de imaginación a un tricolor bastante dormido, sobre todo por la falta de ideas de un Ganso que andaba apagado.
Al minuto 79´ una pelota quieta de Wesley cayó en la cabeza de Bastos, venciendo a Victor y poniendo el 1-0.
Mineiro buscó el empate sin encontrarlo, pero tampoco desesperó sabiendo que queda un trecho largo en su propia casa. Lo mismo hizo San Pablo, porque en el fondo, el gol se lo encontró.
Quizá un empate hubiera sido un resultado justo, por lo que ambos plantearon a su manera. El partido por la vuelta de estos cuartos de final promete un duelo intenso, por la velocidad de ambos equipos y por los destellos de calidad.
El 18 de mayo a las 21.45 será la revancha en la ciudad de Belo Horizonte. El ganador de esta llave se enfrentará al vencedor del duelo entre Atlético Nacional y Rosario Central.
Montevideo Portal
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