Atlético Mineiro recibió en Belo Horizonte a San Pablo, por el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Libertadores.
El duelo en la ida en San Pablo había sido de 1-0 a favor del equipo paulista, en un partido de trámite parejo que le había dejado la mínima ventaja tras un cabezazo de Michel Bastos en el segundo tiempo.
El Mineiro de Diego Aguirre, sin Robinho (por lesión) ni Carioca (por amarillas) salía a la cancha a hacer pesar la localía y a buscar, al menos, un gol que dejara el global igualado para poder respirar más tranquilos.
San Pablo por su parte llegaba a Belo Horizonte con el equipo completo y una mínima ventaja de respaldo, con su zaguero Maicon (que había sido sustituido por Lugano en el partido de ida, y ahora cubría en el banco) en perfectas condiciones, que sería importante.
Pero le costó trabajo al equipo del Patón Bauza, porque a los seis minutos de iniciado el partido, el Mineiro se puso 1-0 cuando el lateral derecho Rocha tiró un bombazo cruzado, el golero Denis tapó y en el rebote, Cazeres la mandó a guardar de oportunista.
Cinco minutos más tarde, a los once del partido, un centro de Douglas le puso la pelota en la cabeza a Carlos Alberto y éste concretó el 2-0 parcial que dejaba a toda la ciudad de San Pablo boquiabierta.
Pero a los catorce minutos, para calmar las aguas, el muy buen zaguero de San Pablo, Maicon, se elevó por los aires en un tiro de esquina y conectó un cabezazo que no pudo contener el golero Víctor.
Con el gol, Maicon hacía valer el peso del gol de visitante y aunque perdía su equipo, le estaba dando la llave a las semifinales, ya que Mineiro debía superar por dos goles en el marcador.
El primer tiempo concluyó con el que sería el resultado final, y dejando ver dos equipos de buen trato de pelota, muy intensos, con buenas individualidades y combinando defensa y ataque.
La segunda mitad, Atlético Mineiro metió adentro del arco a San Pablo y lo hizo trabajar a Denis que sacó varias pelotas. San Pablo supo reponerse del amedrentamiento del local y replegar el avance de los dirigidos por Aguirre, dándole la responsabilidad a Ganso de aguantar la pelota y hacer desesperar al rival. Y lo hizo. Con la habilidad del diez paulista, el mediocampo del Atlético Mineiro empezó a perder la cordura y a pegar de más.
De a poco los minutos corrieron y Mineiro perdía las ideas. El muy buen volante Leandro Donizete vio la doble amarilla sobre el final del partido, tras pegarle una violenta barrida a Ganso cuando éste estaba de espaldas, indicando claramente la rendición del equipo local.
El partido se fue y San Pablo clasificó a las semifinales de la Copa Libertadores, tras haber dejado a un durísimo Atlético Mineiro por el camino.
El equipo de Diego Lugano y el Patón Bauza deberá esperar para ver con quién será el cruce, que puede ser contra el que gane de Rosario Central y Atlético Nacional.
A su vez, si Rosario Central clasifica y también lo hace Boca Juniors, los cruces cambiarán para que dos equipos del mismo país se enfrenten en semifinales, enfrentándose así San Pablo con el ganador entre Pumas UNAM e Independiente del Valle.
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