Con una actuación histórica del delantero Julián Álvarez, que anotó seis tantos, River Plate apabulló al peruano Alianza Lima 8-1 en el Estadio Monumental de Buenos Aires en la sexta y última fecha del grupo F de la Copa Libertadores.

Álvarez, que en el segundo semestre seguirá su carrera en el Manchester City inglés, se convirtió en el primer jugador de la historia de River en anotar seis goles en un partido e igualó el récord anotador para un jugador en un partido de Libertadores.

Alvarez anotó este miércoles a los 15, 18, 41, 54, 57 y 83 minutos, Santiago Simón a los 53 y Elías Gómez a los 79 para la victoria del local, y Pablo Lavandeira anotó el descuento para el equipo peruano de penal a los 89.

El conjunto que dirige Marcelo Gallardo se clasificó a octavos de final como líder en el Grupo F y el segundo de la llave que también avanza a la siguiente instancia es el brasileño Fortaleza que derrotó 4-3 a domicilio a Colo Colo de Chile.

River buscó de entrada cumplir el plan que mejor conoce: plantarse en campo rival para manejar la pelota con opciones varias en ataque y, en caso de perder la posesión, presionar arriba para recuperarla lo más rápido posible.

Como tantas otras veces, el plan de River no tardó en dar resultados, y fue de la mano de su jugador estelar.

Julián Álvarez, convocado al seleccionado argentino, recuperó una pelota a diez metros del área de Alianza Lima, último del grupo, y el juvenil Santiago Simón habilitó al delantero, que definió con categoría cuando apenas iba un cuarto de hora de partido.

Con una fórmula similar llegó apenas tres minutos después un nuevo grito: Simón desbordó por la derecha y envió un centro medido para que otra vez el implacable Álvarez anotara el segundo.

No se conforma

Ante el marcador adverso, Alianza Lima, que lleva diez años sin triunfos en la Libertadores, perdió el libreto de sus buenos intentos en ofensiva en los primeros minutos, y se pareció muy poco al equipo que lleva siete victorias consecutivas en el campeonato local.

Y sobre el final del primer tiempo, un rato breve de inspiración de River alcanzó para que Julián Álvarez quedara con pelota dominada en el borde del área, con el tiempo necesario para sacar un remate que se metió junto a un palo.

Todavía no había terminado el primer tiempo y el delantero con futuro de Premier League ya se había anotado con un triplete.

En el comienzo del segundo tiempo terminó de liquidarse la historia, otra vez con protagonismo de Julián Álvarez.

El cuarto gol llegó por un remate suyo que frenó la defensa y envió a la red Simón a los 53, y un minuto después anotó el quinto al aprovechar un error de control del arquero Campos.

Había tiempo para más y Julián Álvarez lo aprovechó para anotar el sexto gol con una gran definición tras pase de Elías Gómez, quien a los 79 anotó con un remate desde afuera del área el séptimo gol.

Sin darse un respiro, Álvarez decoró el resultado con otra definición en un mano a mano para el 8-0, en el sexto gol de su cuenta personal para una noche soñada.

Con ese tanto, igualó el récord de mayor cantidad de goles de un jugador en un partido de Copa Libertadores, que hasta hoy pertenecía al argentino nacionalizado boliviano Juan Sánchez, con seis goles en otro 8-0, del boliviano Blooming al Deportivo Italia venezolano en 1985.