River Plate se quedó con un justificado triunfo 1-0 sobre Boca Juniors en el encuentro de ida de los octavos de final de la Libertadores, que fue el segundo clásico en cuestión de cinco días. A diferencia de lo hecho el domingo en La Bombonera, el elenco millonario hizo más por el triunfo y superó en juego a un desconocido Boca Juniors, que perdió su primer partido oficial del año.
El equipo de Marcelo Gallardo fue más que el de Arruabarrena en la primera mitad, lapso en el que buscó con más ambición y generó peligro a través de Teófilo Gutiérrez, el más incisivo de los millonarios. El colombiano remató desviado al definir forzado un pase cruzado de Kraneviter a los 10’, y luego complicó a pura movilidad.
Boca Juniors lució inconexo, partió el equipo y no tuvo cómo abastecer a un solitario Calleri. Ni Lodeiro ni Pavón estuvieron finos en el manejo arriba. El mediocampo xeneize se dedicó a combatir pero no pudo jugar, ya que se vio en inferioridad numérica frente a una batalladora mitad de cancha rival. El 4-4-2 local superó al 4-3-3 visitante en la primera parte.
Los de la banda roja se aproximaron pero sin contundencia, por lo que terminaron lamentando el 0-0 con el que se fueron al descanso. Del otro lado el lamento pasó por la salida del Cata Díaz a los 34’ por una lesión en uno de sus hombros, pero el resultado era negocio para lo hecho hasta ese entonces.
Ya en el segundo tiempo a Boca le alcanzaron 13 segundos para hacer más que en los 45 minutos anteriores. De arranque Pablo Pérez encontró al fondo de River dormido y dejó a Calleri mano a mano con Barovero, pero el arquero se agigantó en el mano a mano y sostuvo el 0-0.
River contestó con una ocasión clara que malogró Carlos Sánchez definiendo muy débil a las manos de Orión. No obstante, los visitantes mejoraron y se pararon unos metros más adelante, con Gago tomando el eje central y desplazando al amonestado Cubas a la derecha.
La pelota a un lado y Orión al otro en el penal de Sánchez. Foto: EFE l Nicolás Aguilera.
Gallardo buscó algo distinto con la entrada del gambeteador Gonzalo Martínez por Driussi y luego con el cambio de Mayada por el raspador Ponzio, y fue gracias a Martínez que ganó el partido. El ex Huracán buscó una pelota que parecía perdida y generó el penal que a los 82’ le permitió abrir la cuenta a Sánchez, figura del segundo tiempo.
Teófilo Gutiérrez dispuso de un mano a mano para aumentar la diferencia, pero le apuntó al cuerpo de Orión a los 86’. Para colmo, un par de minutos después el colombiano hizo de las suyas y se hizo expulsar de manera irresponsable por dejarle la pierna de forma innecesaria a Burdisso.
Segundos antes había ingresado Pablo Daniel Osvaldo, tal vez demasiado tarde para lo poco que generó Boca en toda la noche. Si bien se adelantó algunos metros el equipo de Arruabarrena, se quedó en aproximaciones y no pudo convertir el ansiado gol de visitante de cara a la revancha del próximo jueves en La Bombonera.
Montevideo Portal