Peñarol recibirá a Botafogo de Brasil este miércoles desde las 21:30 horas por el partido revancha de las semifinales de la Copa Libertadores de América en el estadio Campeón del Siglo, donde no habrá público visitante.
Por temas de seguridad, y con el objetivo de evitar incidentes entre hinchas de ambos equipos, teniendo en cuenta los antecedentes del encuentro de ida, no se permitirá el ingreso de hinchas del Fogão al escenario carbonero, independientemente de si algún parcial ya compró la entrada y llegó a Uruguay, según supo FútbolUy.
La determinación se tomó luego de una reunión llevada a cabo este lunes entre la institución aurinegra, el Ministerio del Interior y la Asociación Uruguaya de Fútbol. La venta de localidades para los hinchas visitantes estuvo a cargo del propio club brasileño.
La decisión “responde al análisis de la Policía Nacional”, según informó el Ministerio en un comunicado. “Los acontecimientos ocurridos en Río de Janeiro desencadenaron una serie de sucesos que aumentan el clima hostil, que no hacen más que poner en evidencia el alto riesgo que supone la disputa de dicho encuentro deportivo con ambas parcialidades”, agregaron.
“Ante los incidente violentos durante el partido de ida de la Copa Libertadores entre Peñarol y Botafogo, decidimos prohibir el ingreso de los hinchas de Botafogo al Estadio Campeón del Siglo para el partido de vuelta en Montevideo”, escribió Nicolás Martinelli, ministro del Interior, a través de su cuenta de X (antes Twitter).
“Esta medida responde a razones de seguridad y busca evitar posibles represalias que podrían desencadenar nuevos disturbios entre las hinchadas de ambos equipos”, afirmó el ministro, y agregó: “El Ministerio reafirma su compromiso con la seguridad en los espectáculos públicos y asegura que tomará todas las medidas necesarias para que el evento transcurra sin incidentes”.
El pedido inicial habría sido del propio Ministerio, encargado de regular la seguridad global del espectáculo deportivo del miércoles. Conmebol aceptó y, por lo tanto, el club mirasol estaría evaluando colocar a la venta las 4.000 entradas restantes del anillo superior de la tribuna Güelfi, sector donde se iba ubicar la parcialidad brasileña.