Un sentido homenaje al recientemente fallecido exgolero tricolor, Manga, previo al inicio del partido entre Nacional y Bahía por la segunda fecha de la fase de grupos de la Copa Libertadores de América.

Como es habitual, antes del pitazo que permite el rodar de la pelota se realizó el mensaje que exige la Conmebol en su lucha contra el racismo y una vez que terminó se gestaron minutos de mucha emoción.

Mientras que por altoparlantes se exaltaba la figura del arquero brasileño, Luis Mejía levantaba su histórica camiseta mostrándola a las cuatro tribuna, bajo una ovación cerrada de los hinchas, pero además llena de respeto y admiración.

En la historia

Manga, fue arquero brasileño que defendió a Nacional entre mediados de 1968 y junio de 1974, que falleció el pasado martes a menos de tres semanas de cumplir 88 años.

“Manga fue uno de los más grandes arqueros de la historia del fútbol mundial y defendió a nuestra gloriosa selección de 1959 a 1968, habiendo formado parte de dos de los más grandes equipos de nuestra historia: los bicampeones de Río de Janeiro de 61/62 y 67/68”, informó Botafogo en sus redes.

Manga disputó la Copa del Mundo de 1966 con la Canarinha y dos años después inició un glorioso pasaje por Nacional, equipo en el que jugó 198 partidos oficiales y cosechó cuatro Campeonatos Uruguayos (1969, 70, 71 y 72) y tres internacionales en 1971: Libertadores, Intercontinental e Interamericana.

Entre sus hitos más recordados, le atajó un penal clave a Héctor Chumpitaz a los 82 minutos del partido que los tricolores, dirigidos por Washington Etchamendi, empataron 0-0 en Lima frente a Universitario por la segunda fase de la Copa Libertadores 1971. Dos años después, metió un gol de arco a arco para sellar un 7-0 ante Racing en el Estadio Centenario. 

El primero de un histórico triángulo final que se recitaba de memoria y completaron Juan Masnik y Atilio Ancheta jugó en Sport Recife antes de sus 11 años en Botafogo y cinco en Nacional. Después pasó por Inter de Porto Alegre, Operário, Coritiba y Gremio, hasta su retiro en Barcelona de Guayaquil en 1982 a los 45 años.