Este miércoles 14, a las 19:00 horas, Peñarol recibirá en el Estadio Campeón del Siglo (CDS) a The Strongest de Bolivia por la ida de los octavos de final de la Copa Libertadores. Será el noveno partido entre estos dos equipos, y el historial es ampliamente favorable al conjunto uruguayo, que solamente perdió en dos ocasiones frente a este rival.

Todos los encuentros anteriores correspondieron a fase de grupos del torneo de clubes más importante a nivel de Conmebol. El primero fue en la edición de 1971, en Bolivia, partido que ganó 2-1 Peñarol con un doblete de Raúl Castronovo, mientras que en Uruguay fue un aplastante 9-0 a favor de los mirasoles, con cinco del mencionado delantero argentino.

Luego se volvieron a ver las caras en 1989 y los partidos se saldaron con un 2-1 para el Aurinegro como visitante (Carlos Aguilera y Adolfo Barán), y el que hasta ahora es el único empate en el historial, un 1-1 en el que Aguilera volvió a anotar. En 2004 jugaron nuevamente y hubo un triunfo para cada lado: 4-0 en el Estadio Centenario para el Carbonero y 2-0 en el Hernando Siles de La Paz para los atigrados.

Y los últimos antecedentes datan de 2018, cuando Peñarol perdió 1-0 de visitante y ganó 2-0 como local en el CDS, con tantos de Cristian Palacios y Cristian el Cebolla Rodríguez. De esta manera, el historial es favorable al Aurinegro, con cinco triunfos, un empate y solamente dos caídas, ambas en Bolivia y en este siglo.

La otra vereda

Un día más tarde, en el mismo horario, Nacional será local en el Gran Parque Central (GPC) ante San Pablo de Brasil, rival al que ha enfrentando por Copa Libertadores en cuatro oportunidades, y todas por octavos de final, misma instancia en la que se verán las caras en esta oportunidad.

En 1992, la ida disputada en el Estadio Centenario fue 1-0 para los brasileños, y en la vuelta, jugada en el Morumbí, también se impusieron los paulistas, esa vez 2-0. Luego nos trasladamos al año 2008, cuando en el GPC fue 0-0 y en la vuelta en Brasil ganaron los locales 2-0.

Con las cartas vistas, el historial favorece al San Pablo, con tres triunfos y un empate en cuatro partidos disputados, pero lo más llamativo es que el Albo ni siquiera pudo convertirle a este rival.