Leonardo Ramos, entrenador de City Torque, lamentó la derrota 3-2 a manos de Peñarol en el Estadio Centenario, donde valoró el juego desplegado por sus dirigidos y apuntó sin nombrarlo a Ignacio Ruglio, presidente de los carboneros, por sus habituales quejas sobre los arbitrajes.
“Cuando la gente habla y comenta constantemente algunos fallos arbitrales, hace mella. Y cuando hay una campaña de estar hablando constantemente de los jueces, es difícil. Es una campaña que se hace y siempre están disconformes con algunas cosas. Eso en algún momento puede surtir efecto”, expresó.
Las palabras de Ramos apuntan al penal pitado por Javier Feres, a raíz de una mano de Santiago Costa que posibilitó el tercer tanto aurinegro. “No fue penal. Para mí [a Santiago Costa] lo empujan antes y en el movimiento tampoco veo el brazo demasiado separado del cuerpo y no tuvo intención de jugar el balón”, opinó.
“Lo que teníamos que hacer y lo que preparamos en estos días se realizó. Hicimos dos goles y pudimos haber hecho algún gol más. No tuvimos la suficiente tranquilidad como para poder aguantar esos últimos dos minutos del primer tiempo. Un gol atrás de otro le hace mella a cualquiera”, analizó sobre el trámite de un partido que ganaba 2-0 en el minuto 23.
“Para el segundo tiempo el equipo salió con otro ímpetu y el partido se hizo más trabado. Después del gol hubo un equipo solo por la intención de jugar y de ir hacia adelante. Cuando tenés un fallo contra un equipo grande, lo pagás”, agregó.
“El equipo está consciente de lo que está jugando y lo ha demostrado en los últimos dos o tres partidos. Hoy, ante un rival importante, plantamos una cara que es la que deberíamos tener todos los partidos. Esto es final a final, partido a partido, y hay que ganar lo que queda por delante”, señaló, y agregó que no hay tiempo para lamentos”.