El entrenador de Peñarol, Mauricio Larriera, aseguró tras la victoria por 2-1 ante Colón, estar “frustrado” por no haber podido conseguir clasificar con los mirasoles a la siguiente fase de Libertadores o a Sudamericana, pero destacó que fueron competitivos.
“Siento frustración de no haber pasado a la siguiente instancia de la Libertadores y de no conseguir siquiera el segundo objetivo que era llegar a Sudamericana”, comenzó diciendo el DT en conferencia de prensa.
“El hincha es pasional. ¿Qué le puedo decir? Que estoy frustrado, nada más, saben la amargura que me provoca esto”, prosiguió más tarde: “es casi una realidad inexorable que tiene nuestro fútbol”.
“Me queda una cierta tranquilidad de que fuimos competitivos, me quiero quedar con eso y nada más. Hoy en Los Aromos estamos sufriendo como el hincha o más, nos duele muchísimo, porque somos profesionales, pero tratamos siempre de rescatar el espíritu amateur. Estos muchachos si no entregaron más, es porque no había más”, agregó más tarde.
Lo de siempre
Larriera contó que el partido lo pensó desde el “plan de juego” y explicó: “no salir desesperados, había que ser fuertes del punta de vista defensivo para luego ir a ganar. Fue un grupo tremendamente parejo, y a pesar que no había brasileños, somos cuatro equipos de tres países muy competitivos, en el cual no pasamos por detalles. Sabíamos que no dependíamos de nosotros, hicimos lo nuestro, pero no alcanzó”.
Sobre los incidentes en la tribuna Guelfi entre hinchas sabaleros y mirasoles, comentó: “es una pena porque fue en un momento donde estabamos muy bien. Tengo entendido que cuando fuimos de visita hubo algún tipo de inconveniente importante. Ojalá que vayan bajando los decibeles porque la violencia en el fútbol y en América en particular, nos hace muy mal porque esto se ve en todo el mundo. Hay cosas que se pueden controlar y otras no”.
También reflexionó que en la actualidad: “intentamos sostener los partidos desde el punto de vista defensivo y en eso estamos muy bien. Pasó más que nada por no pegar en los momentos justos, detalles. Fundamentalmente es la producción ofensiva que nos costado, incluso a nivel local estamos bien posicionados, pero con pocos goles a favor. Es un detalle que sufrimos la temporada pasada también y que ahora se profundizó. Hay que ser trabajando para ser más efectivos.
“Esto sigue como ha seguido siempre”, dijo el entrenador y cerró: “tener esta amargura no es estar entregado. Tenemos dos finales más en lo local y hay que ganar y esperar”.