Este martes, Richarlison anotó un gol en el partido entre Brasil y Túnez en el Parque de los Príncipes de París y un espectador le lanzó una banana al terreno de juego mientras celebraba el tanto.
La Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) acudió a Twitter para condenar el ataque racista sufrido por el futbolista, a través de las palabras de su propio presidente, Ednaldo Rodrigues, que expresó su “repudio” ante este tipo de comportamientos.
“El combate contra el racismo no es solo una causa, es un movimiento fundamental para eliminar esta lacra del planeta. Los castigos deberían ser más severos” apuntó Rodrigues.
Este miércoles, su equipo, el Tottenham Hotspur inglés, denunció a través de sus redes sociales el ataque racista que sufrió: “El racismo no tiene cabida en el fútbol ni en ningún otro ámbito. Estamos contigo, Richy”.
El de Richarlison es otro episodio más de racismo en el ámbito futbolístico, después de los comentarios racistas vertidos la pasada semana contra su compatriota Vinicius Jr. por parte de hinchas del Atlético Madrid en el Metropolitano, durante el derbi madrileño.
Además, en el caso del jugador del Real Madrid, el propio Richarlison salió en defensa de su compañero en la selección tras los comentarios racistas en contra de Vinicius previos al choque con el Atlético: “Es una situación triste. Espero que Vini marque mañana y se divierta sobre el campo”.