Ángel Di María, criticado en anteriores eliminaciones de la selección argentina por sus actuaciones o por lesionarse antes de encuentros fundamentales, volvió a ser clave en una final, como le pasó varias veces en su carrera.

El Fideo anotó ante Nigeria en la final de los Juegos Olímpicos de Beijing 2008 para sellar el 1-0 y colgarse el oro, y volvió a convertir el único gol en la definición de la Copa América 2021 frente a Brasil en Maracaná. Este año repitió en Wembley, donde metió el segundo en el 3-0 sobre Italia.

Este sábado, cuando la prensa manejaba que no sería titular, él le escribió a su esposa, Jorgelina Cardoso, para asegurarle que Argentina conquistaría la Copa del Mundo. Además, le agregó que él haría el gol “porque está escrito como en el Maracaná y Wembley”.

Y Angelito cumplió. El rosarino, que cumplirá 35 años en febrero, jugó su mejor partido con la casaca celeste y blanca, forzó el penal para el 1-0 de la final ante Francia y metió el 2-0 cerrando un contragolpe espectacular.

Dos días después de la final, su esposa divulgó la conversación que mantuvieron el sábado, en la víspera del duelo ante los galos.

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