El expresidente de Peñarol, Juan Pedro Damiani, se refirió a su decisión de no presentarse a las próximas elecciones de la institución que se realizarán el próximo 18 de noviembre y mencionó: “Es difícil soltar el amor de la vida”.
Damiani, entrevistado en el programa Vamos que vamos (Radio Uruguay 10.50 AM) fue consultado por su decisión, que la dio a conocer por una carta pública y mencionó: “Ahí expresa claramente una decisión que fue muy meditada, pensada, ya que veo que el club está en un nivel de división muy grande, que me cuesta reconocerlo, que se transformó. Estamos peleados con todos, en el cual los adversarios, en vez de estar fuera, parecen estar dentro”.
“Debía dar un ejemplo, ya que es muy difícil manejar al club con este nivel de enfrentamiento”, aseveró más tarde, y agregó: “Se ha hecho una campaña importante para desacreditar. Hace muchos años dije que nos estamos ‘nacionalizando’, porque estos problemas no pasaban por nosotros, eran en otros lados”.
“Me pareció que tenía que dar el ejemplo”, repitió, y fue a más: “Y lo hice a pesar de tener buenas posibilidades de ganar. Me costó muchísimo, porque soltar siempre es difícil, y más al amor de tu vida”.
Su visión
Damiani continuó explicando que no libró “un cheque contra el banco de la vanidad”, y comentó: “Tomé una decisión que ojalá sea buena para la institución, eso es lo que más quiero en la vida”.
“Se puede ganar y perder en la cancha, pero no debemos estar enfrentados continuamente, descalificando y mentir. Me parecía que iba a ser una campaña de bajo nivel, por eso tomé este camino”, amplió.
“Yo no me amputo todavía”, dijo sobre si en un futuro podría volver a ser candidato, y agregó: “Me siento muy vital, y siempre que haya elecciones, porque los peñarolenses son muy generosos, estaré en el bolillero”.
“En vez de construir sobre lo que estaba bien, se trató de hacer un relato que no tiene nada que ver y que no soporta absolutamente ningún archivo”, aseguró, y confesó: “Peñarol tenía los mejores juveniles. Ahora hay que ver si los tiene, me dijeron los que estaban cerca que no, que se desarmó lo que funcionaba por gente que vive para la política, el populismo. Elegir un enemigo para justificar cuando las cosas no salen es eso, y los adversarios están fuera del club, no adentro”.
Por último, sobre si piensa apoyar a algún presidenciable, fue clarito: “No lo voy a hacer. No hay damianismo sin Damiani, pero hay gente que sabe cómo pensamos. Me hubiera gustado que se unieran todos, pero eso es pensar en Disneylandia”.