Enviado a La Plata
El futbolista de la selección uruguaya sub-20 Juan Cruz de los Santos declaró luego de la victoria celeste frente a Italia por 1-0 y la consagración del Mundial en La Plata (Argentina).
“Tengo muchas sensaciones, pero más que nada orgullo y alegría de poder conseguir lo que obtuve”, contó el jugador de River Plate.
El atacante recordó ediciones pasadas: “Sabíamos que generaciones anteriores habían estado a un paso. La gente también lo sabía y tenía esa espina. Pudimos cumplir con ellos del otro lado del charco, pero de locales”.
“Fuimos intensos, no los dejamos jugar ni respirar y, además, atacamos rápido. Ellos comprimían mucho el bloque, por lo que el espacio estaba por afuera y teníamos que recuperar para asistir a los extremos. Superamos al rival, se vio reflejado en el título y se notó durante la mayor parte en el partido”, analizó.
Y continuó: “Arranqué en el banco, pero me tocó entrar. Los primeros partidos no me sentí muy cómodo y no estaba tan bien de confianza. El cuerpo técnico y mis compañeros siempre estuvieron, y les agradezco a ellos que nunca me dejaron caer, porque gracias a eso pude hacerlo de la mejor manera en los siguientes encuentros”.
“Todavía no agarré la copa y no sé cuánto pesa, pero el significado es de tres millones”, dijo entre risas, y agregó posteriormente: “Estábamos esperando el gol con ansias. Cuando el juez pitó, lo único que se me pasó por la cabeza fue mi familia. Lo hago por ellos y estoy orgulloso, así como ellos lo deben estar”.
“Sabíamos que había posibilidades de que muchos uruguayos cruzaran el charco. Nos sentimos locales”, concluyó De los Santos.