El delantero Jonatan Álvez se refirió a su regreso a Danubio, la oferta de Peñarol que no lo convenció económicamente y la apuesta de mostrarse y ser él “de vuelta”.

“Primero tengo que ponerme a la par de los compañeros, subir el ritmo, el nivel y ver”, comenzó diciendo el delantero entrevistado en el programa Fuera de juego (Carve Deportiva) sobre su presente y futuro debut: “cada día que me sienta mejor, ahí le diré al profe y cuando se dé la oportunidad de entrar, ahí tengo que responder de la mejor manera”.

El futbolista de 34 años retorna al fútbol uruguayo tras actuar en Unión de Santa Fe de Argentina; su último partido fue en setiembre pasado. Sobre la decisión de pegar la vuelta, confesó: “decidí quedarme acá, no estaba desesperado por buscar un equipo. Me habló uno de los grandes, y me vino a hablar Danubio para decirme que antes de arreglar con cualquier equipo de acá, que hablara con ellos y hacían una oferta”.

“Le agradezco a Juventud que me abrió las puertas para ir a entrenar. Tomé la decisión de no quedar parado del todo, pero sí moverme. Pasó y agradezco a Danubio por abrirme las puertas de vuelta”, aseguró.

“Creo que ya estoy grande, tengo un poco ya de recorrido para tomar decisiones. Tomé la decisión de no ir a uno de los grandes sino venir a mi casa, que acá estoy tranquilo, voy a trabajar de la mejor manera para responder de la mejor manera. La gente me recuerda en el 2014, pero quieren que Álvez en 2023 responda de la misma manera que la primera vez que llegué”, expresó.

“Pensaron que yo estaba desesperado por buscar un equipo porque estamos a marzo ya”, dijo sobre Peñarol y la oferta económica que no lo convenció: “le dije a mi agente ‘yo por esta plata no voy ni loco’, y tomé la decisión. Yo no estoy salvado, no es que gane fortunas tampoco. A Danubio vine y no arreglé por lo económico, vine porque quiero mostrarme, ser yo de vuelta, ser el Jonatan Álvez que fui anteriormente y ya no es por lo económico, es tratar de darle una mano al equipo para llegar lo más lejos posible”, amplió.

“Tengo los pantalones bien puestos para decirle a un grande que no me gustó la oferta que me hicieron. Es sencillo. Danubio también tiene competencia internacional, los pibes se pueden mostrar y seguir haciendo crecer al equipo y a la institución”, cerró.