Jayson Granger y “situaciones que nunca había vivido”: “Escupitajos y dedos en el culo”

Jayson Granger volvió al básquetbol uruguayo en 2023 y se encontró con una liga nueva. Si bien se formó en Cordón, se marchó a los 16 años a España y no llegó a debutar a nivel mayor. Hoy, con 34 años, está descubriendo una forma distinta de vivir el básquetbol y purgando por primera vez una sanción.

En el partido ante Goes, que fue derrota carbonera en Plaza de las Misiones, le propinó un golpe en los testículos a Álex López y fue expulsado. El Tribunal de Penas lo castigó con cuatro fechas de suspensión y no podrá jugar con Defensor Sporting, Aguada, Biguá y Hebraica Macabi, y volverá en la quinta etapa de la Liguilla contra Nacional.

Consultado por su sanción, dijo haberla tomado “bien” en diálogo con el programa Puro básquetbol de Sport 890. “Cada uno se hace responsable de sus errores. Yo cometí un error que no me había pasado en 19 años jugando en Europa. Entré en algo que no tendría que haber entrado”, reconoció.

“Soy responsable de mis actos. Aprendo de mis errores y esas cosas no van a volver a ocurrir. A seguir trabajando y enfocado en lo que me toca”, sostuvo, y explicó que pasó “muchos partidos aguantando situaciones a las que no estaba acostumbrado”.

“He vivido situaciones que nunca me pasaron en la vida: escupitajos, pisotones y dedos en el culo, hablando mal y pronto. Cosas que me he tenido que aguantar y uno es humano y a veces pierde los papeles. Pero está claro que llevo 19 años jugando a esto, es la primera vez que me pasa y obviamente va a ser la última, sin dudas”, expresó.

Consultado por los arbitrajes, consideró que “hay unos límites básicos a la hora de jugar al básquetbol”. “Muchos comentarios que he recibido de jueces son ‘siga, siga’, como si fuese fútbol o hubiera ley de ventaja. El básquet es un deporte de acción y reacción, y cuando pasa una acción hay que cobrarla”, opinó.

“He recibido comentarios como ‘hace 20 años no cobro esto y no lo voy a venir a cobrar ahora’, cuando el básquetbol tiene reglas que hay que cumplirlas, tanto nosotros como los jueces. Si queremos hacer este producto lo más atractivo posible, tanto jugadores como jueces debemos ser más autocríticos y ver en qué podemos mejorar. Serviría para mejorar a los equipos y la liga”, concluyó.